La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) realiza este martes un paro de 36 horas en toda la administración pública con movilización al Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado que conduce Federico Sturzenegger.
La concentración será en el Obelisco, y desde allí los trabajadores marcharán hacia la sede de esa cartera en la Avenida Roque Sáenz Peña 788, en una medida de fuerza que se extenderá durante todo el miércoles, para confluir con el paro de transportes.
«En el Estado hay sindicalistas que militan la resignación y el miedo en los sectores de trabajo. Destruyen nuestros salarios, nos echan como perros, quieren vender todos los inmuebles del Estado, ¿Cuándo van a parar si no paran ahora? ¿Cuándo van a marchar si no marchan ahora?», apuntó Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE.
Además, indicó que «la única manera de evitar que el Estado termine de ser usurpado por los grandes grupos empresarios es estando en la calle. La gente empieza a tomar conciencia de la estafa. Le mintieron, no había ´ñoquis´ ni un Estado sobredimensionado. Este gobierno protege y se abraza a la casta».
“El que alquila no llega ni a mitad de mes”
Aguiar señaló que «hoy un empleado público con hijos y que tiene que alquilar no llega a ni a mitad de mes. Exigimos la inmediata reapertura de las paritarias y demandamos un incremento que permita recuperar todo el poder adquisitivo perdido durante los últimos meses. Rechazamos que la paritaria en la Administración Pública Nacional sea utilizada para disciplinar el resto de las negociaciones públicas y privadas».
«Si nuestros justos reclamos no encuentran respuestas, las medidas se van a profundizar, la conflictividad irá en ascenso y la afectación de la paz social no será nuestra responsabilidad.
«Será responsabilidad de quien tiene que garantizarla con políticas, que es el Gobierno», concluyó Aguiar.
Pérdida de poder adquisitivo
Desde el gremio señalaron que la medida de fuerza surge a partir de la pérdida del poder adquisitivo en el Estado nacional, que ya supera el 34% durante la gestión de Javier Milei, sumado a la intención del Gobierno de congelar los salarios para lo que resta del año.
Ante esta situación, el sindicato demanda la inmediata reapertura de las paritarias y un aumento que permitan recomponer los salarios.