El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) junto con el Centro Europeo por los Derechos Humanos y Constitucionales (ECCHR, por sus siglas en ingles) de Berlin, Abuelas de Plaza de Mayo y otros organismos entregaron una carta a la canciller alemana, Angela Merkel, con motivo de su visita al país, en la que manifestaron su preocupación por los retrocesos en las políticas de Memoria, Verdad y Justicia, y con una dura crítica a la retórica adoptada por el gobierno de Mauricio Macri respecto a los crímenes de la dictadura cívico militar, resaltaron el nombramiento del negacionista Darío Lopérfido como Representante Especial para la Promoción de la Cultura Argentina en Berlín, y le pidieron que trate el tema de la relevancia de la cultura de la memoria, con el gobierno nacional.
La nota, que lleva la firma de Wolfgang Kaleck, del ECCHR y la Coalición alemania contra la Impunidad, fue entregada a la canciller que este jueves homenajeó a las víctimas de la última dictadura durante una visita al Parque de la Memoria, en la Costanera Norte, donde lanzó a las aguas del Río de la Plata una ofrenda floral, junto a Marcelo Brodsky y Vera Jarach, de Madres de Plaza de Mayo.
En la misiva resaltan la desaparición de los alemanes Klaus Zieschank, Elisabeth Käsemann, Nora Marx y Juan Miguel Tannhäuser en 1976 y 1977, cuyos nombres están en los muros del Museo por la Memoria, así el comportamiento de la empresa germana Mercedes-Benz involucrada en la desaparición de 16 sindicalistas activos en la planta de González Catán en esos mismos años. Pero también le advirtieron los retrocesos en la política de memoria y de juzgamiento de los crímenes de lesa humanidad.
El gobierno de Mauricio Macri recurrió a una retórica que hace peligrar los extraordinarios avances en materia de elaboración de la memoria histórica argentina. Del mismo modo, los crímenes de la dictadura militar son progresivamente relativizados, así como también es cuestionado el número de víctimas por parte de integrantes del actual gobierno argentino, señalan. Además de recordar la renuncia de Lopérfido, obligada por la reacción social, y su posterior designación en Alemania, apuntaron que el propio Mauricio Macri se expidió en el marco de una entrevista escéptico respecto del número de desaparecidos.
La nota, que también está acompañada por las firmas de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Fundación Memoria Histórica y Social Argentina y Familiares de Detenidos Desaparecidos por Razones Políticas, califica de único al fenómeno de elaboración de crímenes de lesa humanidad que se lleva a cabo en el país desde 2005 que juzgó, condenó y llevó a la cárcel a cientos de represores, proceso en el que resaltaron el compromiso de los organismos de derechos humanos y las decisiones tomadas durante los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, como factores decisivos en el marco de la exitosa acción judicial.
En ese marco, recordaron también la decisión de la Corte Suprema que benefició con el 2×1 al represor Luis Muiña, y la fuerte reacción de la sociedad civil argentina.
Justamente Argentina es considerada un ejemplo histórico de elaboración social, artística y jurídica del pasado, la que constituye uno de los pilares del Estado de derecho y la democracia del país, le solicito tratar el tema de la relevancia de la cultura de la memoria así como la permanente elaboración jurídica del pasado en el marco de su reunión con los miembros del gobierno argentino, especialmente con el presidente Mauricio Macri», concluye la carta, que también firmaron Buena Memoria Asociación Civil, APDH, Liga Argentina por los Derechos del Hombre (LADH), Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (MEDH) y el Servicio de Paz y Justicia (Serpaj).
La política de Memoria, Verdad y Justicia fue parte del protocolo en la visita de la canciller alemana. En la visita al Museo por la Memoria, Merkel estuvo acompañada por Vera Jarach que, con su pañuelo blanco en la cabeza y un cartel con la leyenda Son 30.000, ratificó la crítica de los organismos a la avanzada negacionista que vive el país.
«Queremos saber donde están nuestros hijos robados. Ellos nos tienen que decir. No se puede negar», sostuvo la Madre. Merkel se mostró conmovida y aseguró que «en la Argentina es una necesidad recordar ese capítulo oscuro de la historia». La canciller llegó al monumento a las víctimas de terrorismo de Estado acompañada por el vicejefe del Gobierno porteño, Diego Santilli.