La guerra judicial del gobernador jujeño Gerardo Morales contra Milagro Sala sumará este miércoles un nuevo capítulo: la justicia jujeña dispuso el 7 de noviembre como fecha de inicio de un nuevo juicio oral y público contra la Diputada del Parlasur encarcelada desde el 16 de enero de 2016.
La causa es por un tiroteo en el barrio San Francisco de Alava en la capital provincial, en la que fue acusada como instigadora de intento de homicidio por uno de los autores materiales de la balacera al que el juez Pablo Pullen Llermanos sobreseyó apenas la señaló. El expediente es uno por las que ese magistrado la mantiene con prisión preventiva en una cárcel construida especialmente para ella en la localidad de El Carmen.
El juicio oral comenzará este miércoles en el Tribunal en lo Criminal N°2 de Jujuy y Milagro está acusada junto a Fabián Alberto Ávila como supuestos autores de intento de homicidio “agravado por precio o promesa remuneratoria”. Además de Sala, el juicio también tiene como imputado a otro preso político: Alberto Esteban Cardozo, acusado por tentativa de homicidio simple.
La causa, conocida como la “balacera de Azopardo”, investiga un episodio ocurrido el 27 de octubre de 2007 y la investigó el juez residual Pullen Llermanos, que para involucrar a Sala en el expediente utilizó una única prueba: la declaración de Páes, quien fue autor material del hecho, pero que fue sobreseído tras denunciarla.
El otro acusado, Fabián Ávila, negó las declaraciones de Páes y señaló que el enfrentamiento contra Cardozo fue originado por “cuestiones de cancha”.
La jugada del juez se produjo en diciembre de 2016, cuando la dirigente social llevaba casi un año presa y enfrentaba el primer juicio impulsado por Gerardo Morales en el que terminaron acusándola, también, con una única prueba: los dichos del “Cochinillo” René Arellano, un empleado del gobernador.
El Tribunal que la juzgará estará integrado por las juezas Claudia Cecilia Sadir, Mónica Cruz Martínez y Liliana Pellegrini y para las audiencias –que se realizarán los días 7, 14, 21 y 28 de noviembre y 5, 12 y 19 de diciembre, a partir de las 08.30- están citados más de una veintena de testigos.
La balacera de Azopardo
La causa que llega a juicio es la versión con la que Páes consiguió el sobreseimiento y la libertad. Es el relato que montó Pullen Llermanos y que asegura que Milagro Sala convocó a Ávila a su casa y le pidió que matara a Cardozo a cambio de una vivienda que ya le había entregado en una venta -según el juez- simulada.
El episodio conocido como la “balacera de Azopardo” ocurrió el 27 de octubre de 2007, entre las 10.30 y las 11.30, cuando Ávila condujo un automóvil acompañado por Jorge Rafael Paés, hasta la calle Santa Victoria donde encontraron a Cardozo, quien se dirigía a una carnicería.
Según la reconstrucción realizada en la instrucción, Ávila bajó del coche con un revólver en la mano y disparó contra Cardozo, quien a su vez habría sacado un arma y respondió.
En el tiroteo, una bala disparada por Ávila hirió una menor de edad, 11 años, que estaba en la carnicería a la que iba Cardozo. Tras el altercado, los que habían llegado en auto huyeron.
Esa es la versión difundió el Poder Judicial de Jujuy. Sin embargo, en el expediente hay cinco testigos, dos de ellos policías, que declararon haber visto a Páes bajar del auto armado y disparar en contra de Cardozo junto con Ávila.
Al juez Pullen Llermanos, la sola declaración de Páes negando esos hechos le bastó para dictar su sobreseimiento. Eso y haber acusado a Sala: Páes estuvo prófugo desde el momento de los hechos hasta febrero de 2016. Apenas declaró lo benefició con la prisión domiciliaria, y en agosto, lo liberó.