Luego de un mes de contactos de alto nivel entre Buenos Aires y Washington, la Casa Blanca ofreció una señal sobre el rol que puede tener Estados Unidos en la negociación de Argentina con el Fondo Monetario Internacional. Lo hizo a través del subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo, que oficializó un diálogo virtual que tuvo con el ministro de Economía, Martín Guzmán, este martes.
El pronunciamiento del número dos de la secretaria Janet Yellen fue a pedido del gobierno argentino y sucedió mientras el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, transita el último tramo de una visita por ese país que concluirá en Nueva York. Según informó el Tesoro, Adeyemo le pidió a Guzmán y al representante argentino ante el Fondo, Sergio Chodos, «un marco sólido de política económica para Argentina» para respaldar al país en la negociación que mantiene con el Club de París, cuando faltan 45 días para el último vencimiento de un pago de 2.400 millones de dólares.
Si no se concreta un diferimiento, el país caería en un virtual default, pero esa decisión está vinculada a las señales que envíe el FMI en el marco de la renegociación de la deuda argentina. La administración del presidente, Alberto Fernández, apunta a conseguir el apoyo de Estados Unidos dentro del directorio del Fondo, que preside Kristalina Georgieva, para reprogramar los pagos de la deuda de 45.000 millones de dólares contraída durante la presidencia de Mauricio Macri. El tema es la principal misión de Guzmán y forma parte de la agenda que llevó Massa en Washington. «Estamos bien encaminados para resolver el tema Fondo y el tema vacunas», le dijo a Tiempo el titular de la Cámara baja desde la capital estadounidense, antes de partir hacia Nueva York, donde este jueves participará de los últimos puntos de la agenda.
La recorrida comenzó el domingo pasado en Washington. Fue con una cena en la casa del consejero Juan González, asesor del presidente Joe Biden para América del sur, del Consejo de Seguridad Nacional. Ambos estuvieron juntos hace un mes, luego del encuentro virtual del funcionario con el presidente Alberto Fernández. Desde entonces comenzó el tramo más caliente para dos pedidos con plazos urgentes. El apoyo en la renegociación con el FMI y en la adquisición de más vacunas para Argentina, tanto para destrabar la negociación con el laboratorio Pfizer como para levantar las restricciones de ese país para exportarlas.
La mención a las vacunas que hizo Massa desliza las expectativas que tiene para destrabar la negociación con la multinacional farmacéutica sin cambiar la ley sancionada por el Congreso para la adquisición de inyectables contra el coronavirus. La Casa Rosada trabaja con la Cancillería desde hace meses para que Estados Unidos levante los impedimentos para la exportación de vacunas fabricadas en su territorio, una medida que posibilitaría la compra a otros laboratorios.
El lobby desplegado por Massa apuntó también a exhibir que el gobierno argentino está en manos de una coalición peronista. Además busca demostrar que existe una coordinación entre sus socios y por eso habló desde Washington para resaltar el contacto de Guzmán con el Tesoro, poco después de que el ministro reapareciera públicamente en Buenos Aires como invitado principal de un encuentro organizado por el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp) en Hotel Four Seasons.»No es nuestra idea un país de impuestos bajos y gasto público bajo», dijo Guzmán a los empresarios convocados. «El tema de cómo atacar la informalidad es un problema que no se resuelve solamente con cuestiones impositivas. Es un problema macroeconómico», sostuvo el ministro para sostener la orientación de su política económica. Lo hizo un día después de hablar con el número dos del Tesoro, que le pidió un plan económico «sólido».
La señal del Tesoro es parte de las expectativas que tiene el gobierno argentino dentro de los contactos que mantiene desde hace un mes cuando el consejero González visitó la Argentina.
Este miércoles Massa también mantuvo una reunión con Bob Menendez, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado. Fue el último contacto realizado en el Capitolio, tras una serie de encuentros que incluyeron a Gregory Meeks, titular de la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes y uno de los firmantes de un proyecto de declaración que le pide a Biden que utilice su peso en el directorio del FMI para apoyar la negociación en medio de la pandemia de la deuda de 30 países en vías de desarrollo.
La última escala de la gira se concretará este jueves en Nueva York, con una charla en el Consejo de las Américas, invitado por su titular, la lobbysta Susan Segal y un encuentro con el expresidente Bill Clinton.