El presidente Mauricio Macri volvió a defender a su amigo y titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas, acusado de haber recibido miles de dólares por parte de la empresa brasileña Odebrecht como sobornos.
Desde Asia, donde participa de una gira oficial, Macri dialogó con Ari Paluch en Radio Latina. El conductor le consultó por qué separó preventivamente a Gómez Centurión de la Aduana y no a su amigo Arribas.
Porque había una denuncia que merecía ser investigada que llevaba una cantidad de pruebas contundentes y desde el día cero en lo de Arribas no han habido pruebas contundentes de nada, contestó el mandatario, aunque evitó profundizar esa línea.
Es demasiado arbitrario. La Justicia falló en primera instancia y vuelve a haber un testimonio de un señor Meirelles que quién sabe quién es. Lo único que sabemos es que está acusado de delincuente. Qué valor puede tener su testimonio de él sin ninguna prueba. Estamos tranquilos, seguirá el proceso, si quieren abrir la causa otra vez que se reabra, agregó.
En ese sentido, acusó a la procuradora general Alejandra Gils Carbó. Una vez más la procuradora con algunos fiscales está n marcando un camino muy arbitrario, fuera de todos los protocolos que hay judiciales».
En realidad, el 1 de junio se harán públicas las delaciones de Odebrecht y sabremos quiénes cobraron en Argentina por los contratos que recibió Odebrecht en el gobierno anterior. A partir de 1 de junio vamos a saber la verdad de lo que pasa, que es parte de mi compromiso, que no haya más impunidad en la Argentina», aseguró.