En medio del escándalo por corrupción que involucra a ex funcionarios y al titular de la Agencia Federal de Inteligencia, Gustavo Arribas, la constructora brasileña Odebrecht anunció que deja su lugar las obras del soterramiento de las vías del tren Sarmiento.

La firma vendió su participación del 33% a la italiana Ghella, que ya integra la Unión Temporaria de Empresas (UTE) encargada de las obras junto a IECSA, que hasta hace poco pertenecía a Ángelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri, y la española Comsa.

Así, la Italia Ghella pasará a controlar el 70% por ciento de la UTE encargada de esta emblemática obra, aunque todavía resta la aprobación por parte del gobierno nacional.

La obra tiene un presupuesto de 3.000 millones de dólares y un avance de apenas el 3%. Según publica Clarín, Ghella tenía a su cargo las direcciones del Proyecto y de la Producción y ahora sumará además la de Ingeniería.

Lorenzo Ghella, dueño de la firma italiana, es un viejo conocido de los Macri. Según publicó el año pasado Pagina 12, desde 2007 se asoció con Ángelo Calcaterra en la conformación del Grupo ODS (Obras, Desarrollos y Servicios), en el que quedaron integradas Iecsa y CreUrban.

Este año, Calcaterra se desprendió de IECSA este año, para así evitar cuestionamientos por su parentesco con el presidente, y vendió su parte a Marcelo Mindlin, el dueño de Pampa Energía.