La marea triunfante del Frente de Todos también llegó nada más ni nada menos que el partido de Morón, gobernado hasta el momento por la ex pareja de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y candidato de Juntos por el Cambio, Ramiro Tagliaferro. El competidor por la oposición, Lucas Ghi, se impuso en las PASO por el 47% ante el 37,96% del oficialismo.

“Creo que Morón no escapó a las generales de la ley. El municipio ha sido muy castigado en su actividad comercial e industrial, en sus instituciones; acusó un deterioro general del empleo muy serio y, en particular, el segmento joven ha sido muy castigado”, le dijo Ghi a Tiempo todavía emocionado por la victoria.

“La sensación –continuó– es que es fue un triunfo contundente que expresa una voluntad mayoritaria de cerrar una etapa que evidentemente le ha hecho mucho daño a gran parte de la sociedad. Justamente fue la sociedad quien ha encontrado en el Frente de Todos el medio, el canal para viabilizar su vocación de empezar a escribir un capitulo nuevo a partir del 10 de diciembre”.

Para el candidato opositor de uno de los distritos más populosos del conurbano resultó clave en su elección “el voto de los adultos mayores y el voto de los estudiantes”.

El desafío que tiene por delante Ghi – licenciado en Ciencia Política, periodista y profesor– no es nuevo: ya fue intendente de Morón en el período 2009-2015. Esta vez su lista no tuvo problemas para ganar con soltura en la interna con Hernán Solito.

Para el candidato del Frente de Todos, es el momento de “redoblar los esfuerzos como lo dijeron Alberto y Cristina y como no tengo dudas lo harán Axel y Verónica”, en referencia a Kicillof y Magario.

“Ha sido una victoria que recorrió transversalmente la sociedad y que obliga a poner en actos los compromisos que asumimos en esta etapa. Solo esperamos ratificar este resultado en octubre”, concluyó Ghi.