La abogada de la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu y miembro de la APDH, Natalia Araya, aseguró que, «por creencias, los mapuches no utilizan armas de fuego sino que cuando han tenido que defenderse lo han hecho con piedras».
«Lo que los miembros de la comunidad nos cuentan es que el sábado ellos se encontraban en la montaña y, en un determinado momento, cerca de las 16, fueron sorprendidos por personal de Prefectura que comenzó a correrlos a los tiros, sin darles la voz de alto y disparándoles», aseveró la abogada.
Así lo expresó en declaraciones formuladas a Radio Provincia, en las que indicó que «uno de esos disparos impactó sobre la humanidad de Rafael (Nahuel)», el joven de 22 años que resultó muerto, en un hecho que, desde el Ministerio de Seguridad, definieron como «un enfrenamiento armado».
En tanto, agregó, otras dos personas resultaron con «heridas superficiales» en el marco de ese hecho, «una en un brazo y otra en un hombro».
El sábado último, la Prefectura Naval, por orden del juez federal Gustavo Villanueva, realizó un nuevo operativo en una zona del Lago Mascardi que había sido desalojada el jueves pasado, luego de haber permanecido ocupada desde septiembre pasado por un grupo de familias que conformó el Lof Lafken Winkul Mapu.
En el marco de ese nuevo operativo, en un hecho que desde el Ministerio de Seguridad definieron como «un enfrentamiento armado» y que desde la comunidad mapuche denunciaron como una «represión», Rafael Nahuel resultó muerto en circunstancias que ahora investiga la Justicia.
«La Justicia secuestró todas las armas pero todavía no sabemos cuáles son», detalló la abogada en la entrevista que concedió esta mañana, en la que, además, dijo que el magistrado les había informado que la autopsia había terminado y que había resuelto «apartar a la Prefectura de la investigación».
Por otro lado, Araya dijo que, ese día, por el sábado, «el magistrado no dispuso un procedimiento sino que se hagan ‘rondas’ para encontrar a los miembros de la comunidad que aún se encontraban en la montaña» y reiteró que el juez «no autorizó ningún tipo de represión».
También, la abogada negó que exista vinculación entre la comunidad Lafken Winkul Mapu y el grupo Resistencia Ancestral Mapuche (RAM): «La RAM no tiene absolutamente nada que ver en esto. Esta comunidad no pertenece el RAM», aseveró en ese sentido.
En este sentido, insistió en señalar que la comunidad mapuche «estaba haciendo una recuperación de un territorio que es ancestral y que ha sido un asentamiento del pueblo originario antes de que pasara a Parques Nacionales».
«Primero lo hicieron a través del diálogo, pero no fue exitoso y Parques Nacionales realizó la denuncia para que ordenaran el desalojo», indicó la abogada.