Tras los resultados del domingo, el Congreso que se viene después del 10 de diciembre será igual de polarizado que en la actualidad entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio. Sólo que el oficialismo en el Senado perdió la mayoría propia y en Diputados quedó un número muy parejo entre las dos fuerzas.
Esto indica que los partidos políticos provinciales que se ubican en el medio de ambos polos en la Cámara Baja serán muy cotizados para funcionar como principales aliados del FdT. En este terreno se ubican los oficialismos de Córdoba, Misiones, Río Negro y Neuquén.
También los legisladores que representan al lavagnismo, los socialistas santafesinos, y aquellos peronistas que no se sienten identificados con el kirchnerismo. Son un total de 13 representantes que pueden llegar a ser la llave para destrabar el quórum.
Entre los dirigentes ganadores que asumirán el 10 de diciembre están Mónica Fein, por el Frente Amplio Progresista, Carlos Fernández, por el Frente Renovador de la Concordia, Rolando Figueroa, del Movimiento Popular Neuquino, Agustín Domingo, por Juntos Somos Río Negro, Natalia de la Sota, Ignacio García Aresca, por Hacemos por Córdoba, Claudio Orlando Vidal, por Unidos- Ser Santa Cruz.
Los que continúan en la Cámara de esta misma vertiente son Alejandro “Topo” Rodríguez y Graciela Camaño, de Consenso Federal, el Schiaretista Carlos Gutiérrez, el socialista Enrique Estévez, Diego Sartori, del Frente de la Concordia Misionero, y Luis Di Giacomo, de Juntos Somos Río Negro.
Según los resultados del escrutinio provisorio, el bloque que preside Máximo Kirchner quedará con 118 diputados, en la actualidad tiene un total de 120 y para lograr el quórum se necesitan 129.
Estas terceras fuerzas han acompañado leyes del gobierno durante estos dos años de mandato de Alberto Fernández, como por ejemplo la ley de zonas frías y la transferencia de los recursos de más que había recibido la Ciudad por la Policía Federal. También han sido críticos del oficialismo con la Ley de Biocombustibles.
El espacio que hoy lidera Mario Negri, por su parte, sumó un legislador en las elecciones. Pasará de los 115 representantes que tiene en la actualidad a un total de 116 luego del 10 de diciembre. Los cambiemitas se sienten muy cerca del quórum y para alcanzarlo ya circula un posible acuerdo con la extremaderecha de Javier Milei y José Luis Espert que conquistaron 5 bancas. Dentro de JxC hay sectores que marcan una resistencia a estos dirigentes, pero saben que a la hora de contar porotos pueden ser de gran utilidad aunque se queden cortos igual.
En el Senado, el Frente de Todos, pasó de 41 legisladores a 35, perdiendo el quórum propio que es de 37. Tomarán mayor importancia dos senadores que hasta el momento fueron aliados del oficialismo, el rionegrino Alberto Weretilnek y la misionera Magdalena Solari Quintana. Ambos tienen un mono bloque y han votado en sintonía con el FdT.
Luego de que renunciara a la cartera de Justicia Marcela Losardo, el presidente nombró en ese ministerio al rionegrino Martín Soria. Esto tensó la relación con eretilneck, ex gobernador de Río Negro, y adversario directo de Soria en esa provincia. El senador, que incluso votó a favor del proyecto de ley de Reforma Judicial que envió el presidente Alberto Fernández, mostró su disgusto en el recinto cada vez que tuvo oportunidad, pero continuó siendo aliado del oficialismo.
Por último, el Frente de Izquierda, que conquistó 4 bancas, jugará,,como lo viene haciendo, su propio partido. Por lo general acompañan poco las leyes del gobierno, pero siempre aportan el número para el quórum y dar comienzo a la sesión, lo cual es fundamental.