Toda la zona periférica a la Facultad de Derecho fue blindada por el Ministerio de Seguridad apenas pasado el mediodía para garantizar la tranquilidad durante el segundo debate presidencial.
Desde temprano, camiones hidrantes de Prefectura y Gendarmería, más un grupo importante de hombres de ambas fuerzas, empezaron a tomar posiciones estratégicas, inclusive arriba de los techos de los edificios aledaños, en un procedimiento que pareció algo exagerado por su despliegue.
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Además, efectivos de la Policía Federal y de la Ciudad vallaron varias cuadras alrededor de la Facultad y cortaron el tránsito varias cuadras a la redonda.
A las fuerzas de seguridad se sumaron los perros entrenados en detectar artefactos explosivos y drones estratégicamente ubicados que sobrevolaron la zona.
