«Se recomienda no avanzar en el corto ni mediano plazo con la implementación de un sistema electrónico para la etapa de emisión de voto». Luego de una larga novela de versiones encontradas, el Conicet hizo público el documento elaborado a pedido del Ministerio del Interior, según consta en el primer párrafo del texto, para evaluar la implementación del voto electrónico en todo el país. Sin embargo, la Secretaría de Asuntos Políticos e Institucionales que encabeza Adrián Pérez insistió en negar haber encargado el trabajo.
«No van encontrar a nadie que diga lo que ellos quieren», aseguró a Tiempo Beatriz Busaniche, una de las integrantes de la Fundación Vía Libre, al evaluar el resultado del informe de seis meses de trabajo de la comisión integrada por una decena de expertos de los institutos de computación de todo el país.
«Toda la investigación académica del mundo coincide en que no es posible introducir software al momento de votar. Hay años de matemática atrás. No es materia opinable. Eso no lo entienden. No van a encontrar un comité académico que diga que dos más dos es cinco», insistió.
La publicación del informe estuvo atravesada por versiones contradictorias. Mientras el Ministerio del Interior negaba haber encargado la investigación, el propio Conicet informó el 9 de noviembre a través de su cuenta oficial de Twitter que había entregado el trabajo a la cartera que comanda Rogelio Frigerio. »Ellos lo mostraron a gente del Ministerio, pero formalmente no entregaron nada, nos dieron un adelanto de lo que va a publicar el Conicet. Nosotros no somos dueños de eso porque nunca lo requerimos», aseguraron en Interior ante la consulta de este diario.
Sin embargo, admitieron que sí lo recibieron «algunos funcionarios» pero que no llegó a manos ni de Frigerio ni de Pérez. El informe ahora está en manos del director de Reforma Política, Gerardo Scherlis Perel, que depende de Pérez.
Según pudo saber Tiempo, los funcionarios le habían pedido al Conicet construir un sistema de voto electrónico, pero se acordó primero hacer un análisis de factibilidad. Es más, los funcionarios del Ministerio del Interior le pidieron a los investigadores solucionar tres problemas: el robo de boletas partidarias, su costo y la unificación.
«Me convocaron para hacer informe acerca de la incorporación de tecnología al momento de votar. Desde el Conicet nos dijeron que lo había pedido el Ministerio del Interior y terminamos el miércoles 1 de noviembre. Fue muy interesante porque teníamos diferentes posturas. No era una comisión que estaba en contra del voto electrónico ni que se oponía a incorporar tecnología. Quizá no sea lo que quiere escuchar el gobierno, pero no es conclusivo en decir no a la incorporación de tecnología», relató Dante Zanarini, profesor de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional Rosario. Y agregó: «Pensamos con total libertad de analizar y considerar opciones, sin presiones. El informe no tiene sesgo».
Otro de los integrantes del equipo, Nicolás Wolovick, contó a Tiempo expresó su sorpresa por las desmentidas oficiales. «Me parece sorprendente que se estén desentendiendo de algo que hizo el Conicet. Queremos que el informe sirva a todos los que van a tratar este tema. No hay opiniones, son cuestiones técnicas. Nos pidieron discreción con el contenido, pero la comisión no era secreta», explicó Wolovick, doctor en Ciencias de la Computación y profesor en la Universidad Nacional de Córdoba.
La «desmentida» de Interior está relacionada con las conclusiones que los especialistas ya publicaron en distintas instancias académicas y que hicieron oír el año pasado en el Senado, cuando el gobierno quiso incluir en la Ley de Reforma Política la máquina de votar en el cuarto oscuro, uno de los pocos fracasos del oficialismo en el Parlamento. El gobierno defiende el proyecto con el argumento de agilizar el proceso electoral, pero el sistema sólo se usa en algunos lugares de Estados unidos y partes de Bélgica, la India, Brasil y Venezuela, además de ser un sistema desacreditado en el resto del planeta. «Es la post verdad al extremo», sostuvo Busaniche. «