Es el propio presidente Mauricio Macri y sus funcionarios los que no cumplen la ley. Macri, Rodríguez Larreta y el ministro Esteban Bullrich dicen que no permitieron la instalación de la carpa docente -que bajaron a fuerza de palos y de gas pimienta- porque Cambiemos hace cumplir las leyes. Sin embargo, es Macri el que no cumple con la Ley de Financiamiento Educativo (Art. 10) ni con el decreto reglamentario N* 457/2007 ni convoca a la Paritaria Nacional, que es el motivo principal del conflicto.
Macri ya avisó que no respetará lo que dice la Justicia y que apelará el fallo de la jueza laboral Dora Temis, que exige al gobierno convocar a la paritaria nacional. Además, el Gobierno quiere destituir a la jueza como represalia por un fallo adverso a sus intereses, lo cual es una medida de adoctrinamiento que nos remonta a las peores épocas de nuestra historia.
Cambiemos se jacta de cuidar el espacio público. Sin embargo, en la Ciudad, Clarín construyó un muro en Barracas sin autorización. Se trata de un paredón de 4 metros de alto que cerraba la calle Ascasubi, entre Luna y Magaldi, donde la empresa tiene su planta de impresión. La jueza en lo contencioso administrativo y tributario Lidia Lago declaró la ilegalidad y ordenó la demolición. El Gobierno de la Ciudad, cual abogado del Grupo Clarín, apeló dos veces la medida.
Macri y sus funcionarios apoyaron la Carpa que un sector de la Justicia había instalado en el Congreso, en contra de la reforma judicial impulsada por el entonces gobierno kirchnerista y a favor «de la Justicia Independiente». Ahora, adoctrina jueces cuando los fallos no son de su agrado y desarma las carpas en el Congreso.
El muro de Clarín no se demolió y a la Carpa Blanca la desalojaron a fuerza de represión.