Este martes la CTEP Capital organizó un conjunto de acciones simultáneas en siete shopping porteños. La acción de alta visibilidad buscaba llamar la atención sobre la necesidad de declarar la emergencia alimentaria en la Ciudad de Buenos Aires. Inmediatamente, Juan Grabois fue denostado por los medios por esta medida. El dirigente social aclaró que no participó de la acción a través de su cuenta de Twitter: “Le pido a la prensa canalla y al gobierno que dejen de atribuirme acciones en las que no participé ni organicé. De todo lo que yo impulso o propongo, con errores y aciertos, me hago cargo, pongo la cara y el cuerpo”, expresó el referente social.
“¿No les alcanza con tergiversar mis palabras que además me inventan acciones? En cualquier caso, mejor es atender a los reclamos sociales en vez de inventar demonios”, con estas palabras Grabois cruzó las versiones que le adjudicaban haber participado de la acción en siete shoppings porteños para al mismo tiempo puntualizar que el eje de debería ser la discusión por la emergencia alimentaria.
SOBRE MANIFESTACIÓN EN SHOPPINGS
— Juan Grabois (@JuanGrabois) September 11, 2019
Le pido a la prensa canalla y al gobierno que dejen de atribuirme acciones en las que no participé ni organicé. De todo lo que yo impulso o propongo, con errores y aciertos, me hago cargo, pongo la cara y el cuerpo.
Tiempo dialogó con Rafael Klejzer, secretario general de la CTEP Capital, quien explicó cómo se decidió la protesta y aclaró cuál es la distribución de roles dentro de la organización en la actual coyuntura: “Ahora, Juan está interactuando más políticamente y se corrió de las reivindicación para no empiojar las negociaciones o las relaciones. Él no está involucrado en la toma de decisiones ni de esta acción ni de otras. Esto no significa que estemos enojados ni nada, simplemente son ámbitos diferentes”, contó el referente.
Klejzer explicó que dentro de la CTEP se mueven con “independencia política para decir todo lo que tengamos que decir sin depender políticamente de nadie, ni del Estado ni de los partidos. Por supuesto que la gente votó masivamente en contra de Macri y están muy contentos y esperanzados y hacen el bailecito ese que está de moda. Pero nosotros no nos vamos a callar, ¿cómo vamos a callarnos en esta situación?”, subrayó.
Ante la consulta de si la situación en la ciudad es tan grave como en la provincia de Buenos AIres, Klejzer respondió negativamente pero que “el problema va avanzando”. No sólo porque en los comedores escolares “las raciones se van empobreciendo”, sino porque hay un nuevo problema que son los nuevos pobres, que no tienen contención de los movimientos sociales, que tienen vergüenza y no saben ni dónde están los comedores: “Lo que pasa es que lo que ellos llaman pobres estructurales –y nosotros trabajadores sin derechos– tenemos estrategias de sobrevivencia, es decir, en la villa nadie se muere de hambre porque está la organización popular sosteniendo que no se muera ningún pibe, que no le falte nada a ningún jubilado. Apenas nos enteramos que pasa algo en alguna familia van nuestras mujeres y lo resuelven de alguna manera. El problema son los nuevos pobres que generó este gobierno, la jubilada que no le alcanza, que tiene vergüenza de ir a los comedores, que no sabe dónde están y esta situación la angustia y tarda en reaccionar, el Estado está ausente y no tiene dispositivos para atender a estas personas que no viven en villas y andan dando vueltas, va a la puerta de las iglesias que ya no dan abasto. Con la emergencia alimentaria esto se resuelve al toque. Esto es lo que reclamamos”.
La semana pasada, la CTEP Capital estuvo reclamando frente a la Jefatura de Gobierno porteña que se aplique la emergencia alimentaria en la ciudad de Buenos Aires, y afirman que debería ser más rápido que a nivel nacional, porque “acá hay una sola cámara legislativa. Además, es un distrito más pequeño, que puede decretar directamente reforzar los planes alimentarios en las escuelas, en los comedores comunitarios, en los clubes, en las parroquias. Lo que pasa es que ni el Congreso Nacional ni la Legislatura están trabajando. Estamos hace 15 días con esto, y además creemos que hay que decretar la emergencia en adicciones, hay un problema muy serio en los barrios populares con el consumo y no hay programas de la Ciudad para ellos”.
Para el viernes la CTEP, Metrodelegados, UTE y ATE filiales capital marchan nuevamente a la Jefatura de Gobierno para plantear la emergencia alimentaria y mejores paritarias, el bono, mejores condiciones de trabajo.