La conducción de la CGT, junto a los representantes de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), de Barrios de Pie y de la Corriente Clasista y Combativa señalaron que la consigna Unidos por la justicia social es lo que sintetiza la marcha que, a su vez, tiene el objetivo principal de impulsar la sanción plena de la emergencia social por un año, y con el reclamo de frenar la pérdida de puestos de trabajo como otro de los planteos centrales.
Además del apoyo clave de la CGT, las organizaciones sociales que en agosto pasado movilizaron desde San Cayetano a Plaza de Mayo también contarán con el acompañamiento de la Corriente Federal de Trabajadores y la Federación Agraria Argentina, y no se descarta que otras centrales obreras del país se sumen en las próximas horas.
En una amplia mesa de la sede cegetista de Azopardo al 800, en el cuarto piso, dos integrantes del triunvirato de conducción de la CGT compartieron las razones del apoyo a la marcha junto al secretario general de la CTEP, Esteban Castro, el coordinador nacional de Barrios de Pie, Daniel Menéndez, el dirigente nacional de la CCC Juan Carlos Alderete, el secretario general del Movimiento Evita, Emilio Pérsico, y sindicalistas como el secretario general del SUTERH, Víctor Santa María (titular además del PJ porteño), y el secretario general de UPCN, Andrés Rodríguez, entre otros.
«El gobierno debe escuchar. Este año ya se movilizaron más de 500 mil trabajadores. Las expectativas volcadas a la sociedad no se cumplieron. Es preciso reducir la tensión social», planteó Juan Carlos Schmid, del triunvirato de conducción cegetista y secretario general del Sindicato de Dragado y Balizamiento. Y sobre la posibilidad de un posible veto del gobierno si la norma logra la plena sanción, como ocurrió con la Ley Antidespidos, advirtió:
»El gobierno es dueño de sus actos y también de sus errores. Nadie sabe cuál es el costo político de una reacción de esa naturaleza.»
«La ley (de Emergencia Social) está poniendo de manifiesto una necesidad social. Y pone de manifiesto que tiene que haber recursos del Estado para atender a estos sectores vulnerables que tiene el país. Pensemos que nosotros tenemos más de 4 millones y medio de trabajadores que están en la informalidad, de los cuales un millón y medio son indigentes. Alguien se tiene que hacer cargo de esto», definió Schmid.
Carlos Acuña, también del triunvirato de conducción (SOESGyPE, estaciones de servicio) recordó que «hace casi un año que esperamos ver cómo de alguna forma este gobierno acierta una a favor de los trabajadores, porque todos los aciertos han sido para otro lado en este momento». Y coincidió: «Si alguien está pensando en vetarlo, que lo piense dos veces porque es una incoherencia.»
Sobre las versiones que circulan sobre la posibilidad que se sume alguna de las CTA, Schmid consignó que «todavía no hemos tomado contacto con las CTA, pero van a acompañar simbólicamente». Por su parte desde los movimientos sociales Daniel Menéndez, de Barrios de Pie, aseguró que «no puede transcurrir un año sin que en Argentina se sancione la ley de Emergencia Social».
El esquema de la marcha
Desde las 14, los sindicatos confederados concentrarán desde Av. Belgrano y Entre Ríos, mientras los movimientos sociales lo harán desde Av. 9 de Julio y Avenida de Mayo, para confluir en el Congreso a las 16. También se sumarán la Confederación General Económica (Cgera), la Federación Económica de la Ciudad de Buenos Aires (Feciba) y la Asociación Bancaria (AB), que encabeza la Corriente Federal de Trabajadores (CFT) de Sergio Palazzo. Está previsto que haya cuatro oradores.