Llegó el día. Finalmente la Cámara de Diputados comenzó este martes a debatir en un plenario de comisiones el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), con las exposiciones de los ministros de Salud, Ginés González García, y de Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, y la secretaria Legal y Técnica de la Presidencia, Vilma Ibarra.
Afuera, la Campaña por el derecho al aborto legal realizó una presencia para esta jornada, una de las más importantes, este año para las militantes de la organización. En las redes, los hashtag #AbortoLegal2020 y #AbortoLegalEsVida acompañaron las exposiciones que tuvieron no sólo un perfil técnico, sino también una gran carga emotiva.
La primera en tomar la palabra, luego de la presentación de los Diputados, fue Vilma Ibarra. “Queremos que el Estado acompañe los proyectos de maternidad de las mujeres y primera infancia de los niños”, expresó acerca del envío de los dos proyectos, el programa de los Mil Días y el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo.
Antes de su discurso destacó el trabajo en equipo junto al ministro de Salud y a la ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, además a dos mujeres de sus equipos que trabajaron en la ley de Matrimonio Igualitario y de Identidad de Género.
Destacó que el Ejecutivo toma una decisión de visibilizar el problema de los abortos clandestinos. “Ha fracasado la política de penalizar a la mujer que interrumpe su embarazo; y esto generó una invisibilización de miles y miles de abortos clandestinos”, dijo.
“Sabemos que en la Argentina se llegan a abortos seguros quienes pueden costearlos, clandestinos pero seguros, quienes no pueden no tienen este acceso. Qué les ofrecemos a estas mujeres, amenazas de cárcel. A esas mujeres queremos tratarla en su dignidad, queremos que sienta que tiene el derecho a ser atendida, que su vida no se vea afectada, que su vida pueda recibir información para evitar este círculo de volver a embarazarse, volver a abortar y este camino cuando se ingresa al sistema da salud es un camino que se puede interrumpir. Es ingresar a un sistema de salud que da cuidados, que da accesos”, agregó Ibarra quien redactó el proyecto.
“Sería deseable que no haya embarazos no intencionales, pero eso no sucede. Hay mujeres para las cuales una maternidad forzada no es una opción”.
Además, la mujer enfatizó, “acá no promovemos el aborto, al contrario, queremos descender el aborto. Ninguna mujer está esperando que se sancione esta ley para ir a embarazarse y luego abortar. A las mujeres nos suceden embarazos no intencionales y nos encontramos en la disyuntiva de avanzar con un embarazo o interrumpirlo en las peores condiciones, a esas mujeres el sistema de salud las quiere acompañar”
En referencia al proyecto, expresó, “el texto es un texto cuidado, que recoge consensos históricos y es un texto respetuoso de derechos. Allí se regula la interrupción y la atención post aborto y con ellos intentamos cumplir deberes por tratados internacionales que hemos firmado”.
Por último, expresó, “este proyecto se enmarca en el bloque constitucional que rige nuestro país, nuestra constitución y el bloque que nos obliga a atender la salud y la vida de las mujeres que viene afectada por verse obligada a un aborto inseguro”. Agradeció a todos los bloques partidarios. «Que haya menos embarazos no intencionales, menos abortos, menos complicaciones por abortos inseguros y menos muertes. Y que haya más derechos reproductivos, más embarazos deseados, más salud, más familias, y más vida».
Un problema de injusticia
Luego de Ibarra, fue el turno del ministro de Salud, Ginés González García. “Toda la vida me he dedicado a esto por tres razones la primera hacer lo que cualquier médico quiere hacer mucho más si hace salud pública, la primera es prevenir, la segunda por una cuestión de derechos y la tercera por una cuestión de justicia social”.
Hablo de la cantidad de abortos que suceden por día en la Argentina. “Esto no es un problema que no tiene solución, esto tiene una solución técnica que se aplica en todo el primero mundo”, expresó el ministro al comenzar su exposición. “El aborto como problema de salud pública es un problema serio porque si lo eliminamos de manera científica y técnica eliminamos una causa de muerte”, agregó y sentenció “la penalización estigmatiza a las mujeres, hacen que lleguen más tarde a los servicios y por supuesto genera que los servicios de salud no tengan una respuesta adecuada”.
“Con respecto a la situación de riesgo de los abortos, se llama aguja, se llame percha, se llame tallo de perejil es naturalmente llena de riesgos”, afirmó. Sin embargo, destacó que el número de los ingresos hospitalarios por abortos, en estos años descendió. “Es un hecho alentador, ¿saben por qué es eso? Es por la innovación: se llama misopostrol”. Asumió que “el problema” que tiene ese medicamento es que “en las farmacias tiene un valor de 2.800 pesos”, cifra que no es accesible para muchas mujeres.
“Si el aborto fuera para varones, ya sería ley hace mucho”, enfatizó el funcionario en su exposición vía Zoom desde la Casa Rosada
Por otro lado, el ministro avanzó a hablar además de la salud pública de la equidad. “Esto es un problema donde la injusticia se ve claramente, quien enfrenta más barreras para su acceso son quienes enfrentan más vulnerabilidad, este es un proyecto que también genera justicia social”.
Acerca de los embarazos no intencionales, manifestó. “Buscamos primero que no ocurran embarazos no intencionales y si ocurren que no se resuelvan de una manera que provoque más dolor”.
“La genética del movimiento nacional es la justicia social y cuando hay cosas tan distintas entre las que pueden y no pueden y las consecuencias son tan fuertes para una y para otra, la justicia social tiene que estar”.
“Los que se oponen a la ley de anticoncepción se oponían a que un sistema público proteja a las más débiles y esto es lo que pasa acá. Sé que lo legisladores sufren los aprietes, pero cuando tengan la conciencia de las evidencias, respetando la fe, piensen lo que sufren las mujeres cuando están en estas condiciones de todo tipo. Este es un tema histórico que tiene muchos años y que tenemos la posibilidad de resolverlo bien en el sentido de cambiar una historia de la cual nadie puede estar orgulloso”.
Presentación de Ginés García González
Tras realizar un repaso por los distintos aspectos del proyecto, Elizabeth Gómez Alcorta, aseguró que la iniciativa «viene a dar una respuesta concreta a un problema de salud pública» y que la legalización de la interrupción del embarazo disminuye la mortalidad materna, salva vidas de mujeres y elimina riesgos para la salud y consecuencias para la capacidad reproductiva futura.
“La legalización disminuye los abortos, que es algo que deseamos todos y todas. Por otro lado, como explicó el Ministro de Salud, no estresa al sistema de salud sino que, por el contrario, lo desestresa. La legalización no implica más costos, sino un ahorro para el Estado», enfatizó la Ministra.
Durante su exposición, Gómez Alcorta se concentró en explicar los detalles técnicos referidos a los aspectos de despenalización en el proyecto. Al finalizar la ministra del MMGyD concluyó: “Tenemos que estar a la altura de la responsabilidad histórica para que nunca más muera una mujer en Argentina muera por un aborto clandestino”.
Presentación de la Ministra de las Mujeres Géneros y Diversidad.