Inauguraron el Centro de Acción Cultural Diego Cagliero, para homenaje al joven músico que fue asesinado por la Policía Bonaerense. La Escuela de Educación Media N°3 de Hurlingham cedió el espacio físico para que funcione la organización sin fines de lucro. El evento se realizó este domingo y participaron familiares de personas que padecieron violencia institucional.
El objetivo es desarrollar tres ejes: organización y lucha en reclamo de justicia por Cagliero, actividades culturales, inserción social en el barrio. Sus familiares y amigos tomaron la posta de las inquietudes y sueños del joven que quedaron truncos cuando un grupo de uniformados le arrebataron la vida.
“Este domingo realizamos una asamblea para la constitución del Centro de Acción Cultural Diego Cagliero. Lo hicimos para homenajear y recordarlo constantemente. Es algo que veníamos pensando desde aquel día que lo perdimos, porque era lo que él quería hacer. Durante su adolescencia formó un centro cooperativo de inclusión, pero no pudo prosperar. A pesar del enorme dolor que acarreamos tenemos capacidad y fuerza para hacer realidad uno de los sueños de mi hijo”, cuenta a Tiempo Adriana García, madre de Diego y docente en esa escuela.
”Los propósitos son educativos, sociales y políticos. Todas las acciones que se realicen desde este espacio serán para ayudar a cumplir sueños de jóvenes que tengan complicaciones para poder hacerlo. En este momento hay muchos chicos que necesitan y quieren estudiar pero no pueden hacerlo, desde esta organización los vamos ayudar a que logren sus objetivos. Tendrán un lugar para desarrollar sus expresiones”, continúa García.
Se acercaron personas que apoyan el proyecto y les dijeron a los familiares que estarán siempre para acompañarlos. Los ayudarán a explotar todo lo que tenga que ver con lo artístico en sus distintas expresiones, porque eso hacia Cagliero, lo replicarán en el barrio y en cualquier lugar donde los inviten a participar.
En el acto estuvieron presentes: el diputado provincial Miguel Funes; los familiares de Rafael Nahuel; de Mateo Villica, Sergio Jassi. El Movimiento Mayo; la Comisión de La Aso de Coronado; sobrevivientes de torturas y violencia policial.
“El 28 de este mes vamos a formar una murga, porque es lo que Diego hacia para juntar a los jóvenes y pequeños de su barrio. Es una gran responsabilidad para quienes asumimos este compromiso, porque se trata de brindar contención a los jóvenes que se acerquen al lugar. También vamos a seguir articulando con otras organizaciones y escuelas. Nos involucramos con personas de la educación para que trasmitan el mensaje de prevención sobre la violencia institucional. Para que enseñen a nuestras pibas y pibes sus derechos y obligaciones”, explica García.
“Vamos a dictar talleres de oficios para que la gente del barrio tenga una salida laboral. Interpelaremos a la política provincial y nacional para mostrarles que hay que construir muchas organizaciones de contención como esta. Mostraremos que tenemos voluntad y que estamos abiertos a la discusión con el Estado, pero no seremos partidarios. Las puertas del lugar están abiertas para todos lo que quieran sumarse a este proyecto que tiene como eje ayudar al otro. Es el legado que Diego nos dejó. El núcleo de todo lo que hacemos es el amor”, agrega García.
“Cuando realizamos el evento de inauguración, a pesar de las lágrimas, se generó un momento de mucha conmoción y alegría por estar ahí. Somos muy agradecidos con toda la gente que nos proporcionó un lugar para hablar y expresarnos mientras atravesábamos el peor momento de nuestras vidas. No vamos a dejar de luchar, porque en los casos de gatillo fácil existe una responsabilidad política. Miguel Funes será el padrino del Centro de Acción Cultural Diego Cagliero, es una decisión familiar”, asevera García. Y concluye: “Vamos a perpetuar en el tiempo el pensamiento de mi hijo, para que toda la comunidad lo conozca. Como madre quiero que mis nietos, Camilo y León, vean en mí una batalladora que convirtió el dolor en amor”.
El caso
Diego Cagliero fue asesinado por la Policía Bonaerense el domingo 19 de mayo de este año. El joven músico –de 30 años- y sus amigos venían del cementerio. Ese día sepultaron a uno de sus compañeros. Se movilizaban en una camioneta Fiat Ducato blanca, con las iniciales de la empresa AySA. Cuando volvían pararon en el supermercado Día que está ubicado al 7.600 de la calle Juan Domingo Perón, compraron comida y se retiraron del lugar.
Cuando pasaban por la comisaría Eufrasio Álvarez fueron interceptados por varios móviles policiales. Los pibes se mostraron sumisos y bajaron del rodado con las manos en alto. Pero los policías –sin mediar palabra- dispararon al menos 14 tiros. El único que no pudo bajar fue Cagliero, porque una bala de la pistola reglamentaria del ex oficial Castatt, le perforó el pecho y quedó tendido en el piso de la camioneta.
Semanas atrás la justicia dictó prisión preventiva por el crimen al ex oficial Canstatt, quien alegó sentirse deprimido y, en base a eso, solicitó un arresto domiciliario. La familia de la victima lucha para que eso no suceda.
El colectivo que reclama por Cagliero también pide libertad para Ángel Bramajo, uno de los amigos que iba con él y que permanece detenido injustamente. Está imputado por robo en poblado y en banda, luego de una serie de hechos poco claros que sucedieron ese día que desembocaron en el asesinato del músico.
