El jefe de Gabinete, Marcos Peña, confirmó en el informe que presentó este martes en la Cámara de Diputados que el Estado lleva gastados 10 millones de pesos en el almacenamiento de los kits del Plan Qunita para la asistencia de recién nacidos que funcionó en Argentina durante 2015 y que fue derogado formalmente en abril de 2016
En forma escrita, ante la pregunta del interbloque Frente para la Victoria, la Jefatura de Gabinete contestó que es el Ministerio de Salud quien abona los 770 mil pesos mensuales para guardar los kits del programa derogado por el decreto ministerial 454/16.
Para explicar el gasto, Peña detalló que no pueden ser repartidos debido a la causa judicial que tramita en el juzgado a cargo de Claudio Bonadio. Además, según detalla el informe, son «aproximadamente 27 mil los kits» que se encuentran en guarda.
El número llamó la atención del bloque opositor que espera que la cifra sea cercana a los 60 mil como se había anunciado al momento de desactivar el plan.
La pregunta que seguramente deberá responder el jefe de Gabinete en su próxima visita a la Cámara Baja será sobre los 33 mil kits de diferencia que existe entre lo que se había informado mediante distintos medios en abril del año pasado y los datos del informe presentado el último miércoles en Diputados.
Pese a que los países nórdicos y Estados Unidos avanzan con programas similares al Qunita que ya probaron su eficacia para reducir la mortalidad infantil, el gobierno de Mauricio Macri continúa descartando la posibilidad de avanzar en un proyecto similar. En cambio, según anticipó el informe del jefe de Gabinete, invertirán los recursos en «una campaña de promoción del sueño seguro».
De esta manera, los recursos que el Estado destinaba a la compra de material que era distribuido entre madres y embarazadas, ahora serán destinados a publicidad y a promoción.
En tanto, el informe aclara que el Qunita también será reemplazado por «capacitación a los facilitadores del Programa Primeros Años que deberán llenar ficha de observación donde se registrará como duerme el niño».
Los programas similares al Qunita se desarrollan en Filandia desde el año 1938. Este año comenzó a aplicarse en Estados Unidos, dado que la estadística marca que el 93% de los casos de muerte súbita en los lactantes son provocadas por complicaciones en el sueño. «