El fallo de la Corte Suprema que benefició a acusados de genocidio con el llamado 2 x 1 sigue generando rechazo en las calles. En la tarde de este martes, miles de personas se movilizaron del Congreso de la Nación a Plaza de Mayo convocadas por el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia (EMVyJ) contra esa sentencia y también para enfrentar la contraofensiva represiva que, aseguran, ha emprendido en gobierno de Mauricio Macri en el último mes y medio.
La nutrida columna, integrada por unas 10 mil personas según cálculos de los organizadores, estuvo encabezada por el premio Nóbel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel y Mirta Baravalle, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, entre otros referentes de las organizaciones de Derechos Humanos. También estuvieron presentes dirigentes de partidos políticos de izquierda y de organizaciones populares y sociales.
Al llegar a Plaza de Mayo, los organizadores leyeron un documento en el que señalaron que Macri y todos los gobernadores intentan disciplinar al pueblo para hacer pasar el ajuste y desarticular a las organizaciones populares, y detallaron una serie de hechos represivos ordenados tanto por el gobierno nacional como por los provinciales en el Gran Buenos Aires, Capital Federal, Santa Cruz, Jujuy y Formosa.
Al respecto, el EMVyJ anunció el inicio de una campaña nacional para exigir: No a la represión de Macri y los gobernadores; Abajo toda la legislación represiva, desde las leyes antiterroristas del kirchnerismo hasta el protocolo antipiquetes de la ministra Bullrich; Libertad a Milagro Sala y los 5 detenidos de Jujuy; Libertad a Agustín Santillán y los tres hermanos wichí detenidos en Formosa; Absolución de los petroleros de Las Heras condenados a cadena perpetua en 2013.
Respecto del fallo de la Corte Suprema del 2 x 1, el documento lo calificó de aberrante y es funcional a la política del gobierno macrista que niega los 30.000 desaparecidos y el terrorismo de Estado. También apiuntó contra la Iglesia que llama al pueblo a reconciliarse con los que secuestraron, torturaron, asesinaron y se apropiaron de bebés durante la última dictadura cívico-militar. Y afirmó que esa política de reconciliación, hay que decirlo, la inició el gobierno de Cristina Kirchner al designar al genocida Milani como jefe del Ejército.
El texto señaló que El gobierno macrista promueve el olvido y la impunidad porque pretende reinsertar a las Fuerzas Armadas en tareas de represión interna a fin de imponer los despidos, el ajuste y la entrega.