«Se va a investigar todo. Esto recién comienza y, por ahora, no hay detenidos», aseguró el fiscal general de Mar Del Plata, Daniel Adler, sobre la protesta contra el presidente Mauricio Macri y la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal que el viernes pasado fue reprimida.
El funcionario señaló en declaraciones radiales que todavía deben terminar de ver las filmaciones para determinar cómo ocurrieron los hechos, y pidió mesura en una investigación donde se ha afectado la imagen del Presidente: puede tratarse de estar frente a una agresión o de un atentado a la autoridad».
Consultado sobre cómo se desarrollaron los hechos, Adler indicó que en el marco de una manifestación de crítica, que hace a la libre expresión que tienen que tener los ciudadanos, hubo un incidente sobre el final, donde el Presidente no pudo desarrollar el acto, lo cual constituye una infracción penal, y luego fue agredido con piedras, lo cual constituye otra agresión penal», y agregó: Hay dos situaciones: una formación de un cordón policial perimetral a 500 metros, donde ahí sí hubo una turba y cuando llega el Presidente hay otro grupo de personas que desarrolla estos actos».
Si bien desde el gobierno nacional se apuraron a definir lo sucedido como un ataque al presidente, el jefe de la Policía Bonaerense, Pablo Bressi, aseguró que «no hubo piedrazos contra Macri y Vidal», y señaló que el mandatario «fue agredido verbalmente por unas personas que querían manifestar su descontento».
A los dichos del jefe de la Bonaerense se sumaron a los testimonios de los manifestantes que se sorprendieron por la falta de seguridad y de vallas.
En ese contexto, el fiscal general señaló que aún hay que ver qué tipos de medidas de seguridad se tomaron».
Macri fue recibido en Mar del Plata entre múltiples repudios contra el tarifazo así como por sus recientes dichos sobre los desaparecidos en la última dictadura y las políticas de derechos humanos.