El fallecimiento de la líder de la organización Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, símbolo de la lucha por los derechos humanos en la Argentina y el mundo, trajo repercusiones internacionales. Los primeros en expresarse fueron los expresidentes Evo Morales, de Bolivia, y Rafael Correa, de Ecuador.
«Muy triste y consternado por la partida de la hermana Hebe de Bonfini, histórica, muy respetada y querida presidenta de Madres de Plaza de Mayo. Su lucha incansabe contra las dictaduras por memoria, verdad y justicia, es un ejemplo….», escribió Morales.
Correa, por su parte, escribió: «Gracias por tanto, Hebe heroica y querida. Por ti vamos a vencer».
La expresidenta de Brasil Dilma Rousseff afirmó que con la muerte de la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, «el mundo pierde un ejemplo de dignidad».
«Hebe tuvo dos hijos y una nuera asesinados por la dictadura militar en Argentina. Se convirtió en un ícono de resistencia a la violencia estatal», sostuvo Rousseff en su cuenta de Twitter.