Tan apretado y poco transparente fue el poroteo con el que Cambiemos consiguió quorum, que casi lo pierde por una cuestión de minutos.
En medio de la tensión del oficialismo ante muchas sillas vacías en el recinto, quienes sorprendieron llevando algo de calma al bloque del Pro, la UCR y la Coalición Cívica, fueron los cuatro diputados de Unidad Justicialista de San Luis, que, si bien habían sido críticos en el debate previo en Comisión, se sentaron desde temprano en sus bancas y permitieron el comienzo de la sesión, mientras otros aparentes peronistas “aliados” del gobierno brillaban por su ausencia.
La inesperada actitud de los legisladores puntanos derivó en que el gobernador Alberto Rodríguez Saa difundiera un video grabado en su propio celular, donde afirma su “desencanto y desilusión” con sus comprovincianos y deja en claro su oposición al Presupuesto.
Los puntanos, que todo hace prever que a la hora de la votación lo harían en contra, cumplieron su rol siendo funcionales para que el gobierno cumpla su primer objetivo de un día complejo: conseguir quórum.
Especulaciones que llegan desde San Luis hablan que se trató de una maniobra de Adolfo Rodríguez Saá, enfrentado a su hermano gobernador por su cercanía al kirchnerismo. Aunque no es la primera vez que los legisladores puntanos toman actitudes sorpresivas ante leyes claves. Los especialistas en temas vinculados al Congreso, recordaron hoy que en 2014, cuando la provincia estaba enfrentada con el gobierno de Cristina, también concedieron su voto a la Ley de Presupuesto de entonces a cambio de fondos para crear la Universidad Nacional de los Comechingones, en la ciudad de Merlo.