El plan oficial es arrancar con la vacunación de este grupo de riesgo en febrero, cuando lleguen a la provincia un millón y medio de vacunas. Para inocular a todo el personal de las escuelas se necesitan alrededor de 1 millón de dosis de la Sputnik V. El inicio del ciclo lectivo está previsto para el 1° de marzo.
Kicillof sostuvo que tienen «muchas ganas de volver a la presencialidad» de las clases en la provincia pero que, para ello, «hay que bajar los casos» positivos de coronavirus, que en las últimas cuatro semanas crecieron exponencialmente. El gobernador remarcó que la premisa para volver a las clases presenciales es «que haya la menor cantidad de contagios». Y graficó: «Tenemos 3.300.000 alumnos en la primaria y secundaria, es más que toda la población de la Ciudad de Buenos Aires y es una movilización enorme».
Juntos por el Cambio viene presionando al gobierno por la vuelta a las aulas y le reclama a Kicillof que «copie» al gobierno porteño, a cargo de Horacio Rodríguez Larreta. Incluso hoy, el ex presidente Mauricio Macri publicó una carta en sus redes sociales titulada «Abran las escuelas». En ese texto, el ex jefe de Estado dijo que «la Ciudad de Buenos Aires demostró que es posible abrir las escuelas, respetando los protocolos y las recomendaciones que establece el Ministerio de Salud. Ese camino es el que esperamos que tome la Provincia de Buenos Aires, que tiene la enorme responsabilidad de educar a 5 millones de chicos -prácticamente la mitad del país».
En este contexto, el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, pidió hoy «no hacer politiquería» con un tema «tan serio» como el de la educación. Y aclaró que la vuelta de la presencialidad dependerá también de la vacunación del universo de docentes y auxiliares que trabajan en las escuelas bonaerenses.
Según los números oficiales, son alrededor de 500 mil los docentes, porteros y cocineros que trabajan en las escuelas bonaerenses, adonde asisten 5,2 millones de estudiantes entre el sistema público y privado.
«Si vamos recibiendo las dosis de vacunas que están previstas entre la empresa proveedora y el gobierno nacional, vamos a estar vacunando primero a los docentes y los auxiliares. Si ese objetivo se va cumpliendo, podemos pensar en un año diferente a lo que fue el año pasado en cuanto a presencialidad», señaló Gollan en declaraciones televisivas, pero aclaró que son decisiones que se toman «día a día».
«Debo decirles que cuando habla con los colegas de todo el mundo estas decisiones se van tomando día a día. No hagamos un uso politiquero de estas cosas, son muy importantes, estamos trabajando bien, seamos serios. Si tenemos a la población protegida obviamente vamos a poder tomar decisiones que van a ser favorables a que haya mucha más presencialidad en las escuelas», agregó en referencia a Juntos por el Cambio.
El ministro de Kicillof también dijo que las experiencias internacionales fueron «complejas» y señaló el caso de Nueva York, que debió abrir las escuelas y dar marcha atrás varias veces. «Es para pensarlo bien. De todas maneras, todo está para analizar. Nosotros tenemos la decisión de, si están las vacunas, tener a la mayor cantidad de gente ya vacunada y poder empezar mucho más tranquilos», dijo.
Respecto del operativo que comenzará en febrero, Gollan dijo que se están preparando para vacunar «en el menor tiempo posible» a todos los docentes y auxiliares. «Es un desafío fuertísimo que vamos a tratar de hacer en el menor tiempo posible y poder empezar con mayor normalidad, nunca normalidad porque los cuidados van a continuar. Vamos a tratar de hacerlo en el menor tiempo posible, nos estamos preparando para eso», dijo y cerró: «Por ahora venimos muy bien con la campaña de vacunación de los trabajadores de la salud».