La Feria del Libro se ha convertido en un megáfono que rompe el cerco mediático que rodea el proyecto de Horacio Rodríguez Larreta en busca de cerrar los 29 institutos de formación docente de la Ciudad con miras a concentrar toda la formación en una nueva universidad, la Unicaba. Ya en el lanzamiento de la Feria, un grupo de estudiantes y docentes interrumpieron la intervención de Enrique Avogadro, ministro de Cultura porteño y abuchearon a Pablo Avelluto, el funcionario de esa cartera a nivel nacional. El jueves, en un evento menos escandaloso pero no menos contundente, la Asociación de Literatura Infantil y Juvenil de la Argentina (Alija) durante la entrega de los tradicionales premios Destacados Alija, la asociación dio a conocer un texto contra el proyecto oficial.
Como se hizo habitual desde hace unos años, la asociación hace un repaso de los temas que tocan de cerca al sector. Por ejemplo, ya venían alertando hace un tiempo que se dejaba de lado el Plan Nacional de Lectura, las presentaciones de autores en la Biblioteca Nacional, las compras de libros de literatura para bibliotecas y aulas en escuelas, este año en la Sala José Hernández de la Feria, la entidad hizo foco en la irresponsabilidad del proyecto del cierre de profesorados, ya que provocará una degradación en la formación de los futuros maestros y maestras. El texto completo se copia al final de la nota.
Desde Alija expusieron algunas de las principales críticas al proyecto del PRO (menciona iniciativas similares en Mendoza y Jujuy) como que este proyecto se ha hecho a espaldas de la comunidad educativa, que ha sido inconsulto, y que no posee contenidos profundos. La comunidad educativa, que nunca fue consultada por el gobierno, se vio interpelada y realiza marchas masivas que suelen quedar al margen de las noticias centrales de los medios hegemónicos y de la agenda de discusión pública.
Entre otras críticas que no aparecieron en el documento, pero que están íntimamente ligadas se encuentra que los títulos ya no tendrán alcance nacional, sino solo dentro de la CABA, las pérdidas de puestos de trabajo, la pérdida de la riqueza en la variedad de perspectivas, la privatización del dictado de ciertos contenidos, entre otras. El documento finaliza con un contundente: ¡No al 29 x 1!.
El jurado de especialistas de esta edición estuvo presidido por María Teresa Giacuboni, a quien acompañaron Marta Polimeni, María Inés Bogomolny, Sandra Siemens, Cristian Turdera, Laura Wittner, Victoria Rodríguez Lacrouts y Carla Imbrogno. El Gran Premio Alija fue para la recientemente fallecida Liliana Bodoc por Elisa, la rosa inesperada (Norma). Además entre otros autores e ilustradores, se reconoció a Martín Blasco por Todas las tardes de sol (Loqueleo), Juan Sáenz Valiente, por su novela gráfica Norton Gutiérrez y el collar de Emma Tzampak (Hotel de las Ideas) y a María Teresa Andruetto y Daniel Rabanal (Babel) por el libro ilustrado Los ahogados.
Estimados compañeros y compañeras de la LIJ:
Es costumbre desde hace ya un par de años compartir en este acto de entrega de los premios Destacados algunas cuestiones que, como institución dedicada a la infancia y al encuentro de los lectores con los libros, nos preocupan. Mencionábamos en los últimos años que veíamos cómo algunas políticas que habían alentado el crecimiento del sector en años anteriores se estaban dejando de lado. Observábamos que acciones como las que llevaba a cabo el Plan Nacional de Lectura, las presentaciones de autores en la Biblioteca Nacional, las compras de libros de literatura para bibliotecas y aulas en escuelas, se estaban desvaneciendo. Hoy sabemos que esas y muchas otras acciones se han dejado definitivamente de lado.
Sabemos también que hace pocos días se llevó a cabo el encuentro de Bibliotecas Populares, y celebramos que se haya efectuado la tradicional compra de libros. No obstante debemos señalar como dato preocupante que algunas bibliotecas no han recibido los fondos aún y que esos fondos no han sufrido ningún incremento respecto del año pasado, lo que claramente se traduce en menos libros para las bibliotecas. Además de que, como es por todos sabido, no se están realizando las compras institucionales que todos los años hacía la Conabip.
Una preocupación más, y muy seria, se añade hoy a todas las que venimos enumerando. Es el anuncio de desintegración de los 29 institutos de formación docente de la Ciudad de Buenos Aires, que se suman a otros anuncios en provincias como Mendoza y Jujuy. Desintegrar la formación docente plantea, entre muchos otros problemas, cuestiones que afectarán gravemente lo pedagógico por el vaciamiento de contenidos que esta reforma propone, así como está planteada.
Los profesionales que trabajamos en esas instituciones, los especialistas en Educación de todas las universidades, las comunidades educativas completas, así como los distintos legisladores que participan en los debates en la Legislatura en la Comisión de Educación, sabemos que la creación de la universidad que impulsa el Ministerio de Educación, lejos de jerarquizar y solucionar la falta de docentes, provocará una degradación en la formación de los futuros maestros y maestras.
No nos oponemos al cambio, pero sí a los cambios irresponsables. Este proyecto se ha hecho a espaldas de la comunidad educativa, inconsulto, sin contenidos profundos. Y no se nos escucha. Por eso, en esta tribuna, como en todas a las que podemos acceder, nos posicionamos en defensa de los profesorados. ¡No al 29 x 1!