Sin los votos de Juntos por el Cambio, el Senado convirtió en ley la modificación del régimen de jubilaciones especiales para jueces y diplomáticos con 41 votos positivos y 21 negativos.
Durante el tratamiento de la iniciativa, alrededor de 14 senadores tomaron la palabra en el recinto. Algunas de las expresiones más duras se escucharon por parte de los opositores Martín Lousteau, Silvia Giacoppo y Luís Naidenoff. En la vereda del Frente de Todos pusieron la pimienta Anabel Fernández Sagasti Maurice Closs e Inés Pilatti Vergara.
“Esta iniciativa propone correcciones al régimen especial vigente. Son prudentes, sin intenciones de acabar con los regímenes especiales pero tratando de establecer coherencia entre el beneficio recibido y el esfuerzo contributivo», explicó el miembro informante del FdT, el pampeano Daniel Lovera. “Necesitamos hallar soluciones y que todos comprendamos que es imperioso adecuar los regímenes previsionales especiales a la luz de los principios de la sustentabilidad y la razonabilidad”.
Como miembro informante de la oposición, que presentó dictamen propio, Lousteau señaló: “Estamos acá para tratar un tema de fondo, tal como es el sistema previsional. Estamos para tratar un tema que es serio, que es el 40% del gasto público y que es el principal mecanismo de redistribución de cualquier Estado moderno” “Con esta ley van a cobrar el 93% móvil del promedio de los últimos 120 meses y el 75% de los jueces tiene más de 10 años el cargo», explicó y agregó: “Tenemos que ser capaces de abordar todo nuestro sistema previsional al mismo tiempo. Le pedimos a la Secretaria de Seguridad Social que todos los años nos explique cómo son todos los regímenes distintos del régimen general”.
Al turno de su exposición, la mendocina Fernández Sagasti, manifestó: “Cuando tratamos la Ley de Solidaridad Social nos señalaban que no incluíamos a las jubilaciones de privilegio y nos comprometimos a tratarlas en una ley aparte. Eso estamos haciendo acá y lo digo porque así ratificamos hoy el valor de la palabra». «Hubieran tenido una pizca de republicanismo cuando endeudaron a la patria de la manera en que la endeudaron, cuando desde estas bancadas nosotros exigíamos que el acuerdo con el FMI tenía que pasar por el Congreso de la Nación», subrayó.
Por su parte, Giacoppo advirtió: «Señores, este es el inicio de una película que no nos gustaría ver, una película que no tiene un buen fin, ir por la Justicia es ir por la república. No hablemos de que hoy le estamos sacando privilegios a nadie porque no es verdad. Esto es querer colonizar el Poder Judicial. De los 1006 juzgados federales que hoy funcionan en nuestro país se jubilarán unos 400 jueces”.
El senador del oficialismo, Maurice Closs comentó al tomar la palabra que “para algunos es un maquillaje y los privilegios se mantienen y, renglón seguido, para los mismos, eso va a provocar un éxodo en la Justicia. Si es un maquillaje, ¿por qué se van a ir?”. “No nos tenemos que acostumbrar a las anomalías. Que alguien, cuando cumple la edad que tiene prevista para la jubilación, lo haga, es lo normal», sentenció el ex gobernador de Misiones.
Fue la senadora -del FdT-Inés Pilatti Vergara dirigió su discurso al sector judicial que amenaza con una lluvia de demandas contra la ley. Dijo: «Quizás en una suerte de actuación corporativa los jueces entiendan que este proyecto no es legal. Puede que encuentren algún resquicio de legalidad en su reclamo, pero no van a encontrar legitimidad porque hoy el pueblo está muy mal y no los va a acompañar. Los integrantes del Poder Judicial hasta tienen el atrevimiento de que, cuando alguna vez el Congreso decidió que pagaran el impuesto a las ganancias, por una simple acordada a los tres días se exceptuaron de ese impuesto».
Finalmente, el presidente del interbloque Juntos por el Cambio, Naidenoff, denunció: “Con este proyecto, únicamente están abarcando el 7% del régimen total de las jubilaciones especiales que siguen siendo insustentables. Ha quedado en evidencia que aquí no se modifica ningún tipo de régimen especial, no se modifican privilegios, no se modifica el 82% móvil y lo definieron como un proyecto de mesura».
La letra chica del proyecto establece la edad jubilatoria en 65 años para hombres, elevándola en un plazo gradual y la mantiene en 60 para las mujeres. Otro punto aclara que para el cálculo del haber inicial se van a tomar los 120 haberes al valor que tengan en el momento de pedir la jubilación. Además se eliminó el mínimo de 20 años de aportes en el Poder Judicial como condición para conseguir la jubilación y se mantienen los 10 años de servicios continuos o bien 15 años de desempeño interrumpido.