Sin hacer demasiado aspaviento, sin nerviosismos ni tampoco al menos por ahora- posicionamientos excesivamente mediáticos, el justicialismo de la provincia de Buenos Aires avanza en la conformación de un frente electoral lo más amplio posible. La estrategia es reunificar a buena parte del peronismo del distrito poblacional más grande del país. La única excepción en esa gran coalición pan-peronista parece ser el diputado Sergio Massa, referente del Frente Renovador. Este martes al mediodía, en la sede nacional del PJ de la calle Matheu, se reunieron los integrantes de la Mesa de Acción Política que se creó en el último congreso partidario, en la localidad de San Justo. Con el matancero Fernando Espinoza en el centro de las fotos, en su condición de titular del partido en la PBA, la convocatoria mostró a todas las corrientes internas del peronismo provincial presentes en la reunión. El único faltazo corrió por cuenta del senador bonaerense Norberto García, ligado a Florencio Randazzo.
En el encuentro participaron los dos grupos de intendentes que se agruparon por afinidades políticas, de estrategia y de relación ante el cristinismo. Estuvieron el Grupo Fénix, representado por el propio Espinoza y por la intendenta de La Matanza, Verónica Magario; el Grupo Esmeralda, encarnado en el jefe comunal de Hurlingham, Juan Zabaleta. También se hizo presente el Movimiento Evita, a través del diputado bonaerense Fernando Chino Navarro. Lo mismo hizo el ex titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez. Esos dirigentes compartieron la reunión con representantes del kirchnerismo más cercano a la ex presidenta Cristina Fernández, como el diputado nacional Eduardo Wado De Pedro y al ex subsecretario de Juventud, Facundo Tignanelli. Hasta estuvo presente el Bloque Justicialista de la Cámara Baja, cuya cara más conocida es Diego Bossio. Ese sector estuvo representado por el diputado de extracción sindical Oscar Romero, proveniente del Smata.
Una de las conclusiones del encuentro, divulgada por Espinoza, fue que el PJ bonaerense organizará otro encuentro partidario en 20 días, esta vez en Santa Teresita (municipio de la Costa). Si todo sale de acuerdo a los planes de los organizadores, en ese evento se terminará de gestar la unidad imprescindible para lanzar un frente único del peronismo como expresión electoral del kirchnerismo y el peronismo. La estrategia de la gobernadora María Eugenia Vidal es tratar de boicotear esa apuesta: para ello ya está impulsando y financiando- la inscripción de una lista muletto del peronismo con dirigentes como Aldo Rico, Mario Ishii y Raúl Othacehé. Se terminó con todas aquellas acciones del divide y reinarás que nos querían generar desde Cambiemos y otros sectores. La foto de esta reunión, que marca el camino en este año electoral, es una unidad con todos los dirigentes, en un gran frente electoral con los mejores candidatos, aseguró Espinoza.
De la convocatoria de la Mesa de Acción Política también participaron el histórico apoderado del PJ provincial, Jorge Landau; los intendentes Walter Festa (Moreno), Alberto Descalzo (Ituzaingó), Juan Carlos Veramendi (Ranchos) y Hugo Corvatta (Saavedra); los diputados nacionales Teresa García, Cristina Álvarez Rodríguez, Gustavo Arrieta y Carlos Castagneto; el ex jefe de gabinete bonaerense, Alberto Pérez, entre otros. La cita del justicialismo dejó algunos acuerdos, que serán retransmitidos a otros dirigentes partidarios: una consigna fue comenzar a concentrar las críticas sobre la figura de la gobernadora María Eugenia Vidal, protegida por la mayor parte de los medios. La discriminación en materia de obra pública entre municipios del FpV y municipios de Cambiemos es una vergüenza, se escuchó en la charla. Otro de los aspectos de la gestión de Vidal que será cuestionado es las notorias desigualdades en materia de transferencias por coparticipación en perjuicio de los municipios peronistas.
El contenido del encuentro, las presencias y los intercambios entre los presentes, dejaron una sensación sobrevolando entre los dirigentes que participaron: la posibilidad de una lista de unidad con Cristina Fernández como una de las principales candidatas parece avanzar silenciosamente. La única duda, en ese sentido, la aportó la ausencia del representante de Randazzo.