La Federación Argentina de Municipios, se sabe, es un ámbito con peso e influencia específica entre los intendentes y los gobiernos nacionales y provinciales. Como antecedente más cercano, cabe recordar que este organismo creado por el ex presidente Néstor Kirchner fue un espacio institucional de resistencia al macrismo en el período 2016-2019, el cual intentó desde su gobierno, sin éxito, coparlo y controlarlo.
Tras la asunción de Alberto Fernández en la Presidencia, Tiempo pudo reconstruir que salió a la superficie una puja por la conducción de la entidad, actualmente presidida por el alcalde de Tafí Viejo (Tucumán) Javier Noguera, entre dos de los jefes comunales con mayor influencia política en el Frente de Todos: Fernando Espinoza, de La Matanza, y Juan Zabaleta, de Hurlingham.
En este contexto, la renovación de autoridades padeció varios aplazamientos, el último, en marzo de este año. Para elegir nuevas autoridades, se debe convocar a una asamblea ordinaria, presencial o virtual, en la cual votan todos los intendentes asociados a la Federación “con su cuota al día y que estén presentes”.
Según supo Tiempo, por un lado, Zabaleta tendría el respaldo de algunos funcionarios nacionales de peso y trato habitual con jefes comunales y gobernadores de todo el país. Pero, por el otro, Espinoza estaría incluido dentro de un acuerdo político macro surgido desde las más altas esferas del Frente de Todos.
“El acuerdo macro es que Alberto presida el Partido Justicialista nacional, como ya ocurre, Máximo el PJ Bonaerense, en principio en diciembre, y que Fernando presida la FAM”, confió a Tiempo una fuente cercana a la puja.
En un hipotético escenario de votación entre los alcaldes afiliados a la FAM para elegir entre ambos jefes comunales, las fuentes consultadas por este medio sostienen que Espinoza tendría respaldo mayoritario entre sus pares del interior, mientras que Zabaleta se haría fuerte entre los intendentes del Conurbano bonaerense.
“Tanto Fernando Espinoza como (la actual vicegobernadora bonaerense y ex presidenta de la FAM) Verónica Magario, tienen una relación muy fluida con los intendentes del interior”, remarcaron.
Otro dato a tener en cuenta en este contexto, además, es que el Consejo Nacional del Partido Justicialista designó a Zabaleta como interventor partidario en la provincia de Corrientes.
Por otra parte, así como se mantienen acuerdos a nivel macro para ordenar los posibles cortocircuitos políticos, también se bajó y consensuó un acuerdo tácito para bajar los decibeles en un contexto en el cual la sociedad está concentrada en otra cosa: en cómo sobrevivir a esta pandemia.
Así, en los últimos días y a quien quisiera escucharlo, Espinoza expresó: “Evidentemente, no es este el momento de centrarnos en eso. Enfrentamos una pandemia mucho más terrible que la del año pasado, con decenas de miles de contagios diarios; perdemos vidas todos los días; el personal de salud deja el alma las 24 horas los siete días de la semana; se hacen esfuerzos enormes para ayudar económicamente a la gente y a las empresas por las restricciones a las que obliga el coronavirus en un país que venía devastado por la pandemia neoliberal; se hace hasta lo imposible para conseguir vacunas y seguir avanzando con el plan de inoculación más grande de la historia”.
Desde el lado de Zabaleta, este medio pudo saber de fuentes distritales que la posición va también en esa dirección: priorizar la agenda de las preocupaciones de los vecinos, atender y resolver las urgencias sanitarias derivadas de la pandemia de Covid-19, así como las graves dificultades económicas que deben enfrentar comerciantes y trabajadores en general. “La presidencia de la FAM no es un tema que esté en la agenda del día a día”, enfatizaron.
Así que, por el momento, la puja –pandemia mediante- queda latente, y si bien alguna voz propuso “para julio o agosto” que se lleve a cabo la asamblea de renovación de autoridades, lo más probable es que el recambio quede reservado para diciembre.