“Cuando un extranjero sin residencia y sin documentación delinque y la Justicia determina que cometió un delito, se lo expulsa a su país”. Categórico, el ministro del Interior y Transporte, Rogelio Frigerio, insistió con el discurso que el gobierno comenzó a ensayar este jueves cuando se confirmó que cuatro de los 27 detenidos tras la violenta represión en el Congreso eran ciudadanos de otros países.

“Se va a hacer lo que se hace siempre, lo que está en el protocolo. Y esto ocurre con más dinamismo desde hace un año cuando el presidente Mauricio Macri sacó un decreto para agilizar ese proceso”, puntualizó en declaraciones radiales.  Y completó: “Agilizamos los trámites para que los delincuentes estén lo menos posible en el país”.

El argumento oficial contrastó con la situación en la que fueron arrestados un ciudadano turco, otros dos venezolanos, y un cuarto paraguayo cuando la Cámara de Diputados debatía el Presupuesto 2019 y las fuerzas de seguridad desplegaban un operativo represivo desde la zona del Parlamento a Constitución, según denunció la Coordinadora contra la Represión Institucional y Policial (Correpi). Según la organización, tanto Anil Baran, como Felipe y Víctor Puleo Artigas, y Luis Fretes fueron “detenidos al voleo” en cercanías de la terminal ferroviaria cuando realizaban actividades que nada tenían que ver con la protesta.  

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Frigerio también insistió en vincular a sectores políticos de la oposición con el intento de frenar la crucial sesión en la Cámara baja. “Claramente no es casualidad. Ya van dos veces que por lo menos  un sector de la oposición que sabe que pierde la votación intenta frenar una sesión”, puntualizó.  

Y agregó: “Llama la atención que cada vez que están por perder una votación intenten utilizar el argumento de los disturbios para no votar”. Sin embargo, ante la consulta de su entrevistador en radio La Red, advirtió que no cuenta con “pruebas” para señalar al kirchnerismo.  “La Justicia tiene que determinar quiénes fueron los responsables”, subrayó.