Luego de un extenso plenario en el que los funcionarios del gobierno que encabeza Alberto Fernández se hicieron presentes ante los legisladores, el Frente de Todos cosechó su primera victoria parlamentaria y le dio dictamen a la ley de Solidaridad.
Este jueves a partir de las 15 el texto será debatido en el recinto. Previo a eso,y con acuerdo con la oposición, se llevará a cabo la labor parlamentaria al mediodía y a las 14 la sesión para que asuman los 27 diputados que restan. Con este cronograma quedó saldada no sólo la discusión entre oficialismo y oposición sino también la interna que hizo crujir al principal bloque opositor.
El proyecto que avanzó este miércoles tras una extensa reunión contó con la defensa en el plenario de las Comisiones de los ministros Claudio Moroni (Trabajo), Ginés González García (Salud), Daniel Arroyo (Desarrollo Social), Matías Kulfas (Producción) y la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont, además de los secretarios de Política Tributaria, Roberto Arias, y de Hacienda, Raúl Rigo.
El dictamen de mayoría reunió en total 44 firmas. El texto, más allá del oficialismo, también fue apoyado por el mendocino José Luis Ramón, titular del interbloque Unidad Federal para el Desarrrollo; el misionero Diego Sartori, del Frente Renovador de la Concordia; y Carlos Gutiérrez, de Córdoba Federal, el bloque que responde al gobernador Juan Schiaretti. En tanto, Juntos por el Cambio juntó 35 firmas para su dictamen de rechazo, y ratificó que no aportará al quórum para habilitar la segunda sesión prevista para este jueves
El calculo que circula por los despachos del Frente de Todos muestra que esperan el apoyo de por los menos 135 diputados para lograr la aprobación de la primera ley de la era Fernández.
Antes de que iniciara el plenario de comisiones, el presidente de la Comisión de Presupuesto, Darío Martínez, confirmó que se eliminaría del proyecto el polémico artículo 85, que facultaba al Poder Ejecutivo a “efectuar el rediseño organizacional de la Administración Pública Nacional descentralizada mediante la modificación, creación, fusión y supresión total o parcial de organismos descentralizados, así como modificación de sus autoridades superiores, objetivos, funciones, atributos y competencias”.
En tanto, en el interbloque de Bucca rechazan cualquier modificación que signifique un aumento de las retenciones al campo. En ese sentido, cuestionan que los topes para las alícuotas de los derechos a la exportación pasen del 30% al 33% para la soja y del 12% al 15% para el trigo, el maíz y el girasol, en todas las regiones por igual.
La objeción con respecto al tributo para las exportaciones, junto a otras, volverá a ser planteada en el recinto. Desde el FDT no descartan que se acepten más modificaciones.