El anunciado desembarco de Javier Milei en el conurbano bonaerense comenzó a los tropiezos y marcando una polémica interna sobre el rol de su hermana Karina. La aventura de marketing político que comandará el diputado de ultraderecha en la Provincia de Buenos Ares es parte de una disputa que, como adelantó este diario en su última edición dominical, se anticipó con una múltiple aparición de aspirantes de derecha y ultraderecha por el control de la Provincia. Pelear por el distrito que tiene al 40% del electorado a nivel nacional también definirá, en parte, el posicionamiento y el futuro de quienes aspiren por la presidencia en 2023.

Para el dirigente de La Libertad Avanza son los nuevos desafíos para una fuerza política que, hasta ahora, solo ha hecho demostraciones relevantes de fuerza en la Ciudad de Buenos Aires para construir y consolidar el proyecto electoral que ahora les permitió meter dos bancas en Diputados.

Junto a su compañera Victoria Villarroel, el diputado de extrema derecha coordina desde el Congreso su campaña proselitista y de instalación pública. Este viernes tenía muchas expectativas en el acto que había organizado en el club El Porvenir, de Lanús. Para darle más volumen a la convocatoria llevó al cantante Dipy, que el año pasado estuvo a un paso de ser candidato de Juntos por el Cambio pero sobre el filo del cierre negó todo. El evento dejó sabor a poco: no superó las mil personas y configuró un primer termómetro sobre la capacidad de movilización que actualmente tiene el Partido Libertario, más allá de la General Paz y el Riachuelo.

La aparición del cantante en el espectáculo era un secreto que el entorno del execonomista de Aeropuertos Argentina 2000 mantuvo en reserva. Lo mismo hicieron cuando apareció en La Matanza, en la cocina de un envión de instalación pública que pretende extender a los tres cordones del conurbano bonaerense el caudal de votos que las encuestas le adjudican en los grandes centros urbanos de todo el país. Hasta hace un mes, todos los competidores de Milei por el arco de derecha y ultraderecha le adjudicaban un 20% de intención de voto a nivel nacional, pero en un año no electoral.

Lanús es uno de los distritos más importantes de la tercera sección electoral después de Lomas de Zamora y Quilmes. Desde hace seis años es gobernado por el macrista Néstor Grindetti, que ya se anotó en la pelea interna de JxC por la candidatura a gobernador bonaerense. Este viernes siguió con detenimiento la concentración de los adherentes de ultraderecha en su distrito y lo mismo hicieron los otros políticos que ya se alistaron en la competencia amarilla, como los diputados macristas Cristian Ritondo y Diego Santilli, que hasta ahora se alistan para pelear por el mismo lugar, en una pulseada donde el radicalismo apunta a instalar al titular partidario, Maximiliano Abad, como otro aspirante en carrera. Los pasos de Milei no pasan inadvertidos para ninguno de sus competidores. Se trata del jugador que les aspira votos por ultraderecha desde las últimas dos elecciones y que ahora comienza a dar sus primeros pasos para instalar su candidatura presidencial.

Las instalaciones de El Porvenir en Lanús tienen capacidad para 14.000 personas y en la puesta en escena de este viernes no se vieron más de mil fervientes asistentes. El frío y la falta de estructura propia habrían conspirado contra la masividad que esperaba Milei. Pero más allá de las condiciones climáticas adversas, sus competidores creen que ha comenzado a chocar con sus propias deficiencias discursivas. “No es lo mismo la Capital que el conurbano”, resumió un baqueano de la tercera sección electoral que siguió con detenimiento el armado de La Libertad Avanza en la tierra de Grindetti.

Foto: @JMilei

Basta seguir la transmisión en las redes propias de esa fuerza de ultraderecha para verificar que la presencia del público fue escasa. Casi no reprodujeron tomas de la cancha ni de los asistentes. Sólo se pudo ver a un Milei enardecido y concentrado en hablar de su candidatura presidencial. La ausencia de adherentes no la ignoró. “Un día con tanto frio y con tantas jugaditas sucias, gracias leones”, arengó el diputado y luego reconoció a quienes pusieron sus aparatitos. “Gracias a los que hacen este camino posible a la presidencia. Gracias al Partido Demócrata, a UNITE, al MID, y a mis queridísimos libertarios. No sea cosa que volvamos a escribir la historia y volvamos para tener al primer presidente liberal libertario de la historia”, exclamó ante los presentes.

El despliegue de infraestructura para recibir a los invitados en el acto no le hizo honor a la escuálida presencia. Quienes fueron testigos del fin del evento dieron cuenta de un Milei apesadumbrado que, una vez más, era sostenido emocionalmente por su hermana Karina Milei, la principal asesora política del economista en su aventura electoral.

La foto de una cancha semi vacía que escuchaba a Milei caló hondo en el entramado de fuerzas de ultraderecha. Al cierre de esta nota, el economista ultraliberal, Carlos Maslatón salió a cuestionar a armadores del evento: la hermana de Milei y el exvocero de Domingo Cavallo, Carlos Kikuchi. “Karina es Kikuchi y Kikuchi es Karina. A no engañarse. Isabel era López Rega y López Rega era Isabel. Nosotros, Avanzan los Aliados, somos el nacional-sindicalismo. El líder Milei (Perón) debe reaccionar antes de que el Eje Karina-Kikuchi lo lleve a la catástrofe irreversible”, advirtió.

Con el correr de las horas la discusión interna siguió subiendo de tono y se ganó la atención de los medios. Maslatón confirmó que hay un cisma en ciernes: “Todos los militantes liberales de la República Argentina apoyamos a muerte a Javier Milei Presidente 2023. Pero ninguno de nosotros va a aceptar ninguna orden más de Karina Milei, dictadora barata e ignorante en todos los aspectos, ni del traidor infiltrado de Kikuchi”, ratificó el dirigente de ultraderecha, considerado uno de los voceros del espacio que reivindica a Milei. «