Se está por cumplir un año del brutal asesinato de #RafaNahuel. Se sabe y esta peritado en la causa que él no efectuó ningún disparó, y que murió por un tiro en la espalda disparado por un prefecto que está perfectamente Identificado y  que éste recibió orden de  disparar balas de plomo luego que solicitaran autorización. Se sabe que mintieron al pedir la autorización diciendo que recibían disparos que quebraban ramas, también se sabe que hacia poco las fuerzas federales habían recibido la orden directa del funcionario de mas alto rango político, en sus cabales, de reprimir con violencia manifestaciones de grupos mapuches. Pero no hay procesados, ni presos, ni condenados, ni renunciados, ni disculpas y mucho menos muestras de indignación popular.  

Creo que esta es una muestra cabal de la ideología, cultura del Estado neocolonial que pretende ser una nación y que para al menos aparentarlo tiene como uno de sus valores mas preciados y predicados el rancio racismo genocida unificador.   

La guerra etnocida contra el pueblo mapuche existe  hace 150 años,  desde la creación del estado moderno, y desde ese momento todos sabemos, porque se publicó en varios lados, que de manera cíclica el Estado mata, reprime, envenena, enajena, expolia e intenta cada tanto, un etnocidio definitivo en post de una monocultura necesaria para que el estado-nación, maquinaria institucional del sometimiento económico y político hacia el imperio, finalmente tenga sentido logrando ser, una cultura, una nación, un estado, una patria. Esa es  la línea de producción y mandos necesaria en todos los ámbitos. Pero el que sostiene a todos los demás es el de la seguridad, el control territorial a través de dispositivos mediáticos judiciales. 

Rafael Nahuel es una victima del las fuerzas de seguridad y una re víctima de medios y justicia, su causa esta detenida en el tiempo y a punto de ser otra vez demorada al re asumir en su cargo un juez titular que estaba de licencia por ocupar un cargo en el concejo de la magistratura. Una dilación mas de un hecho comprobado en un alto grado de veracidad. Tal vez ese alto grado de comprobación nos permita ver claramente como operan los medios hegemónicos para que se nublara o se olvidara aprovechando el impulso de la psicótica versión oficial sobre Santiago Maldonado que insiste en que todo había sido una campaña y el  joven solidario con la causa mapuche ¨se ahogo¨, ignorando los antecedentes del caso de Ezequeil Demonty al que varios policías obligaron a saltar al riachuelo sabiendo de su segura muerte y ahora cumplen extensas condenas. 

Los medios embarraron la información con supuestos enfrentamientos y los espasmos de la violencia desatada a posteriori. Luego otro tema se subió al top de las noticias aprobadas por la dama¨ de la seguridad, tales como, el debate sobre Chocobar y otros arranques en la misma línea filosófica de Sarmiento, Mitre o Roca: Imponer la idea de un sujeto social capaz de generar el terror necesario para que los individuos temerosos saquen lo peor de si y justifiquen a cualquier costo la eliminación de lo otro diferente, o al menos le eliminación de sus derechos humanos, garantías y logros económicos eliminación tan necesaria a la hora de subir la capacidad de acumulación de los conglomerados corporativos del mundo. 

Ojala la lucha por la justicia para Rafael aporte en el camino de una pelea inteligente que permita cambiar el eje del debate por el sentido y que sea posible por una vez poder corrernos de la legalidad, las normas y lo justo para empezar a debatir como nos sentimos frente al otro y si estamos dispuestos a intentar la felicidad a traves de la solidaridad, la comprensión y la aceptación de lo diverso y lo colectivo como una inmensa fuente de riqueza en el marco de un estado plurinacional que contenga las decenas de naciones que vivimos en esta tierra. 

El panorama en el mediano o corto plazo que nos espera, sino logramos correr ese eje, será enfrentarnos con los peores monstruos y demonios que la humanidad haya conocido, una maquinaria de tal frialdad y deshumanización preparada para lograr su finalidad con niveles de eficacia impensadas a costa de la eliminación mecánica e industrial de todo lo que no se ajuste a su norma y su finalidad: la acumulación constante de poder y riquezas para las cada vez mas reducidas castas del poder . 

Pablo r Garcia, 

Weney  

Autor de ¨Es la Diversidad Idiota¨ ed Octubres 

Director documental ¨Mapuche Nación que Vuelve