El flamante candidato a presidente de Bolivia por el Movimiento Al Socialismo (MAS), Luis Arce, destacó la importancia de mantener la unidad de la fuerza e intentó bajar el tono a las versiones que hablan de descontento de los sectores indígenas y campesinos, que impulsaban la candidatura presidencial de David Choquehuanca, quien será su candidato a vice. “El ampliado del MAS-IPSP ha resuelto nominarme como candidato a la Presidencia luego de dos días de debate interno buscando la unidad y la mejor fórmula para nuestro instrumento, bajo la conducción del presidente Evo Morales”, dijo Arce, en su primer contacto con la prensa, acompañado por el ex canciller Diego Pary y sin las presencias de Evo Morales y de Choquehuanca.
Arce calificó de “histórico” el debate en el que fue nominado y destacó que cualquiera de los cuatro postulantes tenía posibilidades de encabezar la fórmula. “Los cuatro precandidatos -Arce, Pary, Choquehuanca y el líder cocalero Andrónico Rodríguez- tenían la convicción unitaria, que es lo más importante, la unidad del instrumento”, dijo.Tras la introducción de la conferencia de prensa, ofrecida esta tarde en el Bauen Hotel de Buenos Aires, Arse respondió preguntas. Aseguró que «la reunión en Buenos Aires es oficial, todas las resoluciones son para los militantes de cumplimiento obligatorio de los miembros y las organizaciones sociales que permanecen al MAS-IPSP».
Esta afirmación marca un punto de dureza frente al descontento que manifestaron en Bolivia algunas organizaciones, como la Confederación de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa, conocidas como “las Bartolinas”, que hicieron pública su molestia porque no se respetó la decisión de las organizaciones sociales de postular a Choquehuanca e incluso hablaron de “revisar” las designaciones.
Sobre este clima en particular, Arce señaló que el propio candidato a vicepresidente, líder de las agrupaciones indigenistas, “va a establecer los puentes de diálogo con todos los representantes de la cultura de la whipala que todos hemos asumido, y quién más indicado que Choquehuanca para eso”. No dio precisiones sobre cuándo comenzará la campaña, pero sí aseguró que la estrategia proselitista será en Bolivia.
“Hoy las condiciones para hacer política en Bolivia no son las adecuadas, hay persecución y hostigamiento, no hay garantías para hacer política de manera libre”, pero aseguró que “la campaña será en territorio boliviano”.
El ex ministro de Economía durante la mayor parte de la gestión de Morales, considerado el arquitecto del milagro económico boliviano, agregó que “van a inventar juicios con el pretexto de estar incitando a la desestabilización, pero uno tiene el derecho a ser oposición”.
“Vamos a volver porque tenemos el derecho de volver y ojalá se nos brinde la garantía para hacer campaña”. Arce está asilado en México desde noviembre, adonde viajó acompañando en su refugio a Morales y al ex vicepresidente Alvaro García Linera.
Una de las razones que se esgrimieron para avalar su candidatura, fue su condición de intelectual con llegada a la clase media boliviana. Se lo consultó su esa canal seguía vigente tras el golpe contra Morales. “El MAS y sus políticas económicas sacaron a más de dos millones de personas de la pobreza. Esa gente es hoy la clase media. Cuando el hermano Evo Morales llegó al poder el 65% de la población tenía ingresos bajos y sólo el 33% tenía ingresos medios; hemos dado vuelta esa estructura”, contestó.
“En octubre de 2019 más del 63% de la población tiene ingresos medios gracias a 14 años de aplicación de políticas sociales. Estamos seguros de que el resultado electoral no puede ser adverso”, aseguró.
En su rol de candidato y economista, Arce manifestó su preocupación por el rumbo que está tomando la economía boliviana desde que gobierno Jeanine Áñez. «La gente saca su dinero y compra dólares, esto no es bueno, es el retorno de neoliberalismo” que gobernó Bolivia hasta 2005. “Bolivia ya no es el modelo que comulga con los beneficios sociales y la redistribución de los ingresos”, agregó. “Queremos volver a gobernar para reponer todos los derechos de nuestros hermanos indígenas. Hemos luchado tanto por sus derechos, con el hermano Evo Morales a la cabeza. Ya lo hemos hecho, no estamos hablando de utopías”, aseguró.