El próximo lunes terminan las sesiones ordinarias, por lo tanto, el expediente podría ser debatido en sesiones extraordinarias si es que el Poder Ejecutivo lo incluye en el temario que enviaría al Congreso a partir de la semana que viene.
La iniciativa, que la semana pasada fue aprobada en la Cámara de Diputados, fue dictaminada luego de la breve intervención a través de videoconferencia que mantuvo la titular de AFIP, Mercedes Marco del Pont, con los senadores.
La funcionaria remarcó que “los recursos que se obtengan van a ser aplicados a destinos específicos para ampliar la capacidad del Estado nacional para seguir desenvolviendo políticas activas”.
“Este proyecto grava a los empresarios, no a las empresas”, sostuvo Marcó del Pont y destacó que “la base imponible de este aporte extraordinario a los ricos es muy superior al Impuesto a los Bienes Personales”.
También señaló que “no es cierto que productores rurales deberán vender sus campos para hacer frente a este aporte” y afirmó que “en excedentes líquidos tienen 25 veces más del aporte que tienen que realizar”.
Por otro lado, afirmó que «la decisión de este gobierno es tratar de que la riqueza que se dolarizó y salió de la Argentina vuelva, por eso el impuesto es más gravoso que quienes tienen su riqueza localizada en el país”.
Marcó del Pont dijo que el nuevo aporte alcanzará a 11.865 personas y reconoció que “es más de lo que habíamos estimado hace un par de meses”.
Finalmente, la titular de AFIP aseguró que “no existe evidencia empírica” que indique que “las políticas neoliberales de reducción de impuestos sirven para promover la inversión”.
La intervención de Marcó del Pont no fue acompañada por preguntas de los senadores, ya que la funcionaria se desconectó por cuestiones de tiempo y tras haber sido citada a último momento.
No obstante, desde Juntos por el Cambio el radical Julio Cobos aseguró que se trata de una “doble imposición” porque “es un impuesto igual al de Bienes Personales” y remarcó que “no es coparticipable porque tiene asignación específica”.
“La emergencia fiscal que tienen las provincias no va a ser sustentada por este impuesto. No es el camino adecuado. Y estimo que estará lleno de impugnaciones”, indicó.
La opositora tucumana Silvia Elías de Pérez reiteró que “esto va a generar una judicialización porque se trata del mismo sujeto obligado y del mismo hecho imponible”.
Por el contrario, el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, el peronista cordobés Carlos Caserio habló de una “distribución federal no coparticipable”.
“Es una meta política. Vamos a beneficiar a las pymes de todo el país”, resaltó.
En tanto, el oficialista bonaerense Jorge Taiana advirtió sobre la necesidad de “realizar una reforma tributaria completa y compleja”.
Asimismo, defendió el proyecto al argumentar que «no tiene que ver con empresas, sino con el patrimonio de algunas personas que son enormemente ricas».
«Por una vez, que los súper ricos pongan una contribución mínima para lo que son sus bienes para ayudar a salir de esta enorme crisis”, sentenció Taiana.