Unas 13 horas se extendió el espectacular allanamiento al departamento porteño de la ex presidenta Cristina Fernández ordenado por el juez federal Claudio Bonadio en el marco de la causa de los cuadernos.
Al mediodía del jueves, decenas de policías, peritos y personal de explosivos ingresaron al edificio de Juncal y Uruguay, en el barrio porteño de Recoleta. El operativo se extendió hasta la 1 de la mañana de este viernes.
Los funcionarios judiciales y policiales fueron recibidos por el abogado de la senadora, Carlos Beraldi, quien inmediatamente fue impedido de asistir al procedimiento por el juez.
«El juez dio la instrucción directa para sacarme del domicilio y hacer lo que les parezca. Están ellos solos para hacer cualquier tipo de ilegalidad», señaló el abogado en diálogo con los periodistas que hacían guardia en la vereda.
Beraldi anunció que va a pedir el apartamiento de Bonadio y la nulidad del allanamiento: «Estamos frente a una farsa. Vamos a plantear la nulidad de todo el procedimiento y vamos a pedir el juicio político del juez», afirmó y agregó: «Bonadio no cumple con lo que dijo el Senado. Empezaron con la filmación y se comportan de la manera ilegal”.
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Los diputados y senadores nacionales del Frente para la Victoria calificaron hoy como un «atropello» del juez Claudio Bonadio que no se le permitiera al abogado de la ex presidenta Cristina Kirchner presenciar el allanamiento a su domicilio y responsabilizaron al Senado.
«Denunciamos el atropello cometido por el juez Claudio Bonadio al impedir la presencia del abogado de Cristina Fernández de Kirchner en el allanamiento», manifestaron.
Ese allanamiento tampoco estuvo exento de polémica. Se conoció que los dos testigos de procedimiento que presenciaron la inspección y el registro en la casa familiar de CFK fueron dos militantes de Cambiemos en Santa Cruz muy cercanos al empresario Eduardo Costa, senador nacional por esa provincia.
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