El sindicato cedió ante la presión del Gobierno y dejó lugar a una fuerte la reducción del bono extraordinario que cada empresa productora de leche le destina al gremio mensualmente por cada trabajador. Además la Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina (ATILRA) aceptó condonar las deudas que las empresas tienen por este concepto y negociar a la baja aquellas que ya se encuentren judicializadas.
Ante ese escenario fue que el Gobierno se comprometió a destrabar el crédito de 450 millones de pesos prometidos para el salvataje de SanCor.
Más allá del acto formal, el Estado aporta los recursos ante el compromiso de la empresa de un plan sustentable que incluye una lenta reducción de personal. El acuerdo también deja abierta la puerta para la discusión del convenio colectivo de trabajo de la actividad.
Actualmente las empresas pagan al gremio en bajo el concepto de aporte extraordinario $3.600 por mes por empleado. Al estar atado al sueldo básico, los empresarios calculaban que luego de la firma de la nueva paritaria el aporte alcanzaría los $ 4.000 pesos por cada trabajador.
El acuerdo que se firmó en Trabajo estipula que las industrias que tengan hasta 70 empleados pagarán 750 pesos mensuales por cada trabajador, lo que significa una reducción del 79%. En tanto, para las empresas con más de 70 empleados, el aporte será de $1.500 por lo que en este caso la reducción del 58%.
De esta manera SanCor, por poner el ejemplo más emblemático, pasara de pagar 15 millones de pesos por ese concepto a poco más de 6 millones y medio.
Además, el acuerdo establece que las deudas no judicializadas contraídas por la mora en el pago del aporte serán condonadas. En tanto que aquellas que estén judicializadas se negociarán a la baja. En ese marco también se negociará una reducción para el total de la deuda acumulada por las grandes industrias.
Por otra parte el ministro de Agricultura, Ricardo Buryaile, confirmó que durante la reunión se acordó revisar el convenió coletivo de trabajo. Esa tarea se llevará a cabo en los próximos 30 dias.
Respecto de lo acordado en general Buryaile se mostró conforme. «Lo que nosotros queríamos era previsibilidad para la industria. Hay un gesto de todos los sectores y ahora podemos emepzar a pensar en un industría láctea más comprometida y más competitiva», señaló el ministro en declaraciones a Cadena 3 y agregó: «Hay una reducción del aporte patronal para el sindicato, es importante porque hacia a la competitividad de la empresa. Por eso ahora los empresarios no van a tener excusa en lo que es el tema competitividad».