La campaña contra la vacuna rusa Sputnik V no se detiene. La protagonizan los medios de comunicación abiertamente opositores al gobierno nacional. Una veintena de científicos argentinos, investigadores del Conicet y de otras instituciones, se han propuesto realizar una tarea informativa. Consideran que abundan las “fake news”, en este caso sobre la campaña de vacunación.

Estos científicos se nuclearon alrededor del nombre Ciencia Nuestra. Hoy emitieron un comunicado cuestionando las afirmaciones del periodista del Grupo Clarín Nelson Castro sobre la vacuna producida por el instituto Gamaleya.   

“Sobre la editorial de Nelson Castro sembrando dudas sobre la vacuna del centro Gamaleya, Sputnik V. Dijo Nelson Castro que los estudios de fase 3 concluyen recién en mayo, de acuerdo a la página de clinical trials. Es verdad”, comienza el escrito.

Y luego agrega: “Lo que omite el periodista es que los de Pfizer terminan el 30 de julio”. Es decir, dos meses después que los de Sputnik. “Y lo mismo sucede con el resto. Lo que hay ahora para todas las vacunas es un análisis preliminar de los estudios de fase 3 una vez que han llegado a un número de pruebas que permita hacer análisis de efectividad”.

El comunicado de Ciencia Nuestra destaca que los estudios en mayores de 60 de fase 2 terminan el 30 de diciembre. “Los estudios de fase 2 exclusivamente para mayores de 60 no son condición necesaria cuando ya han concluido el 12 de agosto para la franja etaria de 18-60 años, habiendo evaluado seguridad y eficacia y publicado internacionalmente con éxito”. “Basta con hacer una fase 2/3 donde se evalúe desarrollo de anticuerpos y eficacia al mismo tiempo como han hecho otras vacunas. En el caso de Sputnik, a partir del 22 de octubre se realizó un reclutamiento de 110 voluntarios mayores de 60 para ver seguridad e inmunidad por anticuerpos y células”.

El escrito señala además que “nadie dijo nada respecto a que la fase 2 de la vacuna de Pfizer analizó sólo 15 adultos mayores de 60 con la dosis y formulación actual y los siguió hasta el día 35. Y no se dijo porque en ambos casos está bien, teniendo en este punto Gamaleya más rigurosidad que Pfizer”.

Los científicos destacan que “más allá de este estudio, lo que tiene peso para que defina hoy la Anmat es que el centro Gamaleya inicio el 7 de septiembre un estudio de fase 3 con 40 mil voluntarios entre los que hay miles de mayores de 60 para evaluar eficacia y de los que ya hay resultados preliminares”.

“En el reporte entregado por el centro Gamaleya a la Anmat, en el rango etario de más de 60, sólo había 2 casos, por lo que realizar análisis de eficacia no resultaba correcto. Por eso aún no se aprobó de emergencia para adultos mayores”.

El escrito señala todas las cosas que en los medios no se cuentan sobre la vacuna Pfizer y que muestran que, al igual que con las otras vacunas, la urgencia por la pandemia aceleró los procesos. “Vale aclarar que el estudio de fase 3 publicado el 10 de diciembre por Pfizer posee sólo 20 casos de mayores de 65 a través de los cuales analizan la eficacia en ese rango etario. Es un número bajo pero suficiente para su aprobación de emergencia en varios países,  incluso Argentina”.

“Hoy nos encontramos a la espera de los números que dan resultado a los porcentajes de eficacia que se dieron a conocer anteayer por el centro Gamaleya-remarca el escrito-. Resultan prometedores siendo que han reportado más de 90% de eficacia para el rango etario  de mayores de 60 años”.

Ciencia Nuestra señala además que “tampoco se comunica que la aplicación de la vacuna de Pfizer se demora en Alemania debido a dudas en la cadena de frío durante su distribución. No es simple la logística para su distribución y aplicación dado que requiere estar a menos de 70° centígrados”.

“En todas las vacunas hubo primero sólo gacetillas de prensa. Nos encontramos ante una emergencia sanitaria y en este momento del desarrollo de vacunas para presentar los papeles para uso de emergencia ninguna necesitó publicar todos sus datos”, en ningún país del mundo”. De hecho, señala el escrito Reino Unido aprobó la vacuna de Pfizer el 2 de diciembre  y el laboratorio publicó los resultados una semana después.