Axel Kicillof dio este martes una clase pública en los jardines de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de La Plata, en lo que supo ser el Batallón de Infantería de Marina Nº 3 que funcionó como centro clandestino de detención en la dictadura. Hasta allí llegaron cientos de estudiantes para escucharlo hablar en defensa de la universidad pública y del rechazo al veto de Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario. «Es la lucha por nuestro futuro, así que a seguir bancando los trapos», los arengó en el final de una extensa charla, en la que además le advirtió a los legisladores que no rechacen el veto que serán considerados «traidores al pueblo».
El gobernador habló en el marco del Encuentro por la Universidad Pública organizado por la Federación Universitaria de La Plata (FULP). Llegó ovacionado y fue presentado por las presidentas de esa organización, Albertina Bidart y Sol Alconada. «Estoy orgulloso y contento de estar acá», dijo, en el arranque y contó los entretelones de la clase que, si bien estaba pendiente desde hace meses, terminó organizándose contrarreloj para que ocurriera un día antes dela sesión en el Congreso Nacional. “Es uno de los actos más improvisados de la historia”, disparó entre risas.
Luego pasó a explicar qué lo motivó a participar y aseguró que el propósito está claro. «Queremos dejar en claro a los legisladores que no voten para voltear el veto de Milei que los consideramos traidores al pueblo y a nuestra historia», dijo, y subrayó: «No nos vamos a olvidar de los que mañana voten en contra».
Pidió no dejarse ganar por el desánimo y recordó a lo largo de la historia hubo varios ataques a la universidad pública durante gobiernos liberales. «No son nada originales», se mofó, y puntualizó que en los años 90 hubo «un ataque fuertísimo a la educación con la ley de Educación Superior». también mencionó los intentos de arancelamiento, los exámenes de ingreso y los intentos de privatización de la universidad.
En este sentido, el gobernador aseguró que «nunca pudieron con la universidad» porque hubo lucha en las calles. Y se refirió en este sentido a la última marcha del 2 de octubre que encontró a una multitud movilizándose y le envió un mensaje a los libertarios, a la UCR y al PRO. «Lo que se vio en la calle no fueron solo estudiantes, docentes y no docentes, sino que fue un pueblo entero. Me permito darle un consejo a Milei y a los que van a votar: el pueblo entero está mirando».
Kicillof defendió el rol de la universidad y calificó de «inútiles» e «ignorantes» a los gobiernos liberales que tuvo la Argentina, ya que, detalló, el 85% de los pibes que cursan son primera generación de universitarios. «La universidad es uno de los lugares que mejor materializa los sueños de la sociedad. Ese es el problema con el ataque a la universidad: no es sólo los cientos de miles de pibes que estudian; es a lo que aspiran, a lo que quieren ellos y sus familias», explicó.
Negó que sea un problema presupuestario, ya que sólo representa el 0,14% del Producto Bruto Interno (PBI) y apuntó que los cambios que Milei impulsó en Bienes Personales representan el doble de eso. «Que no vengan con el verso del déficit: quieren un país para pocos y extranjerizado», lanzó y redobló: «Ni chiquito ni extranjerizado, ni sin soberanía ni igualdad, por eso defendemos la universidad pública y por eso es tan importante el día de mañana».
En este sentido, volvió sobre el rol que tendrán este miércoles los legisladores nacionales y le apuntó a la UCR, a la que reivindicó por su rol en la reforma universitaria de 1918. Entonces envió una advertencia a los diputados de esa fuerza centenaria: «Que mañana a ningún radical se le ocurra tirar a la basura lo mejor de su historia bancándole el veto a Milei».
También le dedicó un párrafo a Macri y a los diputados del PRO que votarán en favor del veto. «A Macri le digo que la universidad no puede ser el pacto de la milanesa con Milei así que más vale que los que estaban a favor de la ley antes, ahora voten tirándole el veto abajo a Milei», dijo, y agregó: «No se juega con estas cosas».
Ya en el tramo final de su mensaje, el gobernador cargó otra vez contra el abandono del gobierno de Milei y detalló que su gestión terminará las obras que el gobierno nacional paralizó en 25 universidades, con presupuesto bonaerense. «Lo dijimos durante la campaña y hoy es un mandato: hay que elegir entre la derecha o los derechos, y nosotros vamos a estar siempre del lado de los derechos», dijo volviendo sobre el slogan de su campaña a la reelección.
En esa misma línea, los arengó a seguir peleando por la universidad pública y gratuita, y les pidió seguir «bancando los trapos», organizándose para dar pelea al gobierno de Milei. «Es la lucha por nuestro futuro así que no importa lo que digan, a seguir bancando los trapos, a seguir disputando, a seguir movilizando. Luchamos con el corazón por lo que es nuestro y no lo vamos a entregar», cerró en medio de otra ovación y antes de calzarse el buzo de la UNLP y entregarse a las selfies.