La convocatoria a la oposición que volvió a mencionar el ministro de Economía Sergio Massa este jueves ante los CEO’s que concurrieron al encuentro del Council de las Américas quedó apenas en las buenas intenciones. Es que este mismo día, minutos más tarde, desde la Casa Rosada la portavoz presidencial Gabriela Cerruti le bajó el tono a la iniciativa y descartó que se vaya a implementar una mesa o un espacio institucional promovido desde el gobierno para sentarse a acordar políticas públicas con la dirigencia opositora.
No es la primera vez que Massa convoca a la oposición, por lo menos de palabra. De hecho, el ministro tiene los puentes tendidos con la dirigencia de Juntos por el Cambio, pero también con sus ex compañeros de ruta, integrantes del Interbloque Consenso Federal, votos clave para sumar a las iniciativas legislativas del oficialismo, a partir de su ex función como presidente de la Cámara Baja.
A su vez, desde enero la vicepresidenta, Cristina Fernández, insiste con un llamado a la oposición, en particular para tratar el problema bimonetario. En particular, Cristina sostuvo semanas atrás en El Calafate que sentarse a dialogar para ponerse de acuerdo sobre los grandes temas no implicaba tener que dejar de lado las ideas de cada espacio político. “Ni yo voy a renunciar a mis ideas, a mi historia, a lo que creo, y tampoco le voy a pedir a nadie que renuncie a las de ellos. Tenemos que encontrar un punto de coincidencia común porque, si no, no va a haber Argentina para nadie”, sostuvo, a principios de julio.
Sin embargo, aquella idea de la canasta de monedas que reemplace al dólar y sirva para salir de la bimonetariedad -que incluso contó con el visto bueno de economistas del establishment- quedó por ahora, en suspenso.
Algo similar al planteo de CFK hizo este jueves Massa. “Sería bueno aprovechar la distancia con las elecciones para encontrar acuerdos o consensos básicos. No tenemos que tener miedo de sentarnos en una mesa a buscar acuerdos por más de que seamos de fuerzas políticas diferentes. Lo que está en juego es el desarrollo de la Argentina”, sostuvo en el Hotel Alvear.
En su habitual conferencia de prensa de los jueves, Cerruti descartó que haya alguna iniciativa concreta en ese sentido. “Hay contacto institucional permanente con las provincias gobernadas por la oposición, en el Congreso, en donde hay que llegar acuerdos para que salgan las leyes y en el Consejo Económico y Social. El resto de los diálogos se verá con el tiempo como se van sucediendo”, respondió la portavoz ante la pregunta de Tiempo.
Por lo pronto, la dirigencia opositora ya declinó el convite, en especial después de las críticas y acusaciones que lanzó Elisa Carrió, quien acusó a buena parte de la dirigencia de Juntos por el Cambio de tener contactos con Massa.