Se trató de una «Jornada Nacional de Lucha con acciones alo largo y ancho del país, en defensa del trabajo, la producción y la soberanía nacional», dijo ATE en un comunicado. El secretario general de la CTA Autónoma, Ricardo Peidro, evaluó que la medida fue contundente y vaticinó: «Si bien el plan de ajuste y su impacto sobre la clase trabajadora nos abruma, también nos impulsa a seguir organizándonos para marchar y resistir. Seguramente vamos a conseguir torcerle el brazo a este gobierno ajustador. Este es un día de lucha, y como tal es un día de fiesta para la clase trabajadora».
Según un relevamiento de ATE, se movilizaron los mineros de Río Turbio, de los puertos, del Astillero Río Santiago, de las centrales nucleares de Atucha y Embalse, en Córdoba, de Fabricaciones Militares, del INTI y del INTA. También se manifestaron en el microcentro porteño los trabajadores de la Secretaría de Cultura contra la reciente degradación del que fuera ministerio.
En tanto, las organizaciones sociales coordinaron la instalación de un centenar de ollas populares en diferentes puntos de la Capital Federal. Se vivieron momentos de tensión en el Puente Pueyrredón cuando la Prefectura bloqueó los accesos para impedir que fuera «tomado» por los manifestantes. El puente estuvo bloqueado durante algunas horas.
El cronograma de medidas de fuerza de ATE y la CTA-A incluye otra huelga de 36 horas para el 24 y 25 de este mes, en consonancia con el paro de la CTA de los Trabajadores y de la CGT en la segunda jornada.