La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner fue autorizada este miércoles por la Justicia a viajar a La Habana, Cuba, para visitar a su hija Florencia, quien se encuentra allí bajo tratamiento médico.
El permiso de viaje se consolidó al mediodía cuando se conocieron las resoluciones de los dos tribunales que debían expedirse sobre la autorización solicitada por la ex mandataria y actual senadora nacional.
El primer fallo que se conoció fue el del Tribunal Oral Federal (TOF) 2, que la juzgará por el supuesto direccionamiento de la obra pública vial en Santa Cruz, y que no se opuso a que viaje.
Minutos más tarde, el TOF 8, que tiene el caso conocido como Hotesur, también dio el visto bueno para que la ex mandataria viaje a Cuba entre el 20 al 30 de abril.
El escenario más complejo que enfrentaba la ex presidenta, en relación con el pedido de autorización, era el del TOF 2 porque allí el fiscal de juicio Diego Luciani se había manifestado en contra de que le permitieran viajar.
A pesar de la negativa del fiscal, los jueces Jorge Gorini, Andrés Basso y Rodrigo Giménez Uriburu sostuvieron que no había motivos para negarle el permiso a viajar porque siempre estuvo a derecho y el inicio del juicio oral está previsto para el 21 de mayo.
“Se toma en consideración que durante el periodo por el cual solicita viajar -que abarca un lapso de diez días- no se encuentra prevista la realización de actos procesales en los que resulte indispensable su presencia”, sostuvieron los jueces.
“Debe atenderse a que Fernández de Kirchner ha dado un motivo fundado para viajar, esto es, un problema de salud que aqueja a su hija Florencia Kirchner -quien se encuentra bajo tratamiento en la República de Cuba-, el que acreditó oportunamente”, remarcaron los magistrados.
Los jueces destacaron, además, que la ex presidenta aportó una copia de pasaje de ida, “cuyo destino se ha corroborado que es La Habana, vía aeropuerto de Panamá City” e indicó, a su vez, “los vuelos con los que regresaría” la Argentina y los hoteles en los que se hospedará.
Finalmente, los jueces del TOF 2 requirieron a la ex mandataria que se presente ante el tribunal durante las 48 horas posteriores a su regreso a la Argentina.