La reunión no fue anunciada con anticipación, por lo que la noticia llegó de improviso a las redacciones. Después de diez años de no verse las caras personalmente, la senadora Cristina Fernández y el diputado Felipe Solá se encontraron este martes en el departamento de Juncal y Uruguay, barrio de Recoleta. En ese domicilio reside CFK cuando se halla en Buenos Aires. “Le manifesté a Cristina la obligación de ser amplios en la convocatoria y extender los márgenes. Hay que priorizar los desafíos del futuro y no las diferencias del pasado”, subrayó Solá tras la entrevista, según un comunicado que difundieron sus colaboradores.
Hasta este martes, la relación de Cristina y Solá se había reencauzado pero de manera telefónica o con encuentros hiper-reservados. Durante la charla, ambos dirigentes se sacaron una foto en el living de Cristina, que rápidamente se viralizó por redes y sitios web. “Enfrentamos a un gobierno que abusa del marketing y de las noticias falsas para intentar mantenerse en el poder. Para que en octubre vuelvan a ganar el pueblo, los trabajadores y la clase media no hay lugar para egos ni mezquindades personales”, remarcó Solá.
Durante el encuentro, la senadora y el diputado analizaron la estrategia política con vistas a las elecciones presidenciales de este año. “Le pedí a Cristina una reunión porque es la dirigente de la oposición con mayor peso político electoral y necesitamos decirle a la sociedad cuál es la agenda de la unidad”, aseguró el diputado y ex gobernador bonaerense.
Hasta este martes, la última vez que CFK y Solá habían compartido una actividad en público se produjo en 2007, cuando CFK era candidata presidencial (fue electa con el 45,28%, en lo que fue su primer mandato) y el hoy diputado todavía ostentaba el cargo de gobernador. Esta vez, la coincidencia de Cristina y Solá en una misma foto alimentó una de las hipótesis que circula en el conglomerado nacional-popular: esa versión indica que ambos podrían integrar una fórmula presidencial.