Breve pero ruidosa fue la reunión de este martes en la Comisión de Juicio Político en la Cámara de Diputados. El encuentro estaba convocado con el objeto de los jueces de la Corte Suprema de la Nación hicieran su descargo de manera presencial sufrió la inasistencia de los ministros del Máximo Tribunal -que vienen siendo investigados por los diputados desde enero- y por tanto se levantó la reunión.

Dos minutos le tomó a la presidenta de la Comisión, Carolina Gaillard, explicar que “el encuentro se torna abstracto teniendo en cuenta que no comparece ni el doctor Juan Carlos Maqueda ni el doctor Ricardo Lorenzetti para cumplir con el descargo”. En el caso del titular de la Corte, Horacio Rosatti y del magistrado Carlos Rosenkrantz, los legisladores recibieron su descargo en forma escrita.

Pero además el encuentro se daba en medio de un informe de la justicia que investigó las filtraciones de información en las que se vio presuntamente involucrada una espada del Frente de Todos dentro de la comisión: Rodolfo Tailhade. Integrantes de Juntos por el Cambio, a los gritos, se quejaron tras la decisión del oficialismo de retirarse de la sala. En ese contexto, Juan Manuel López (Coalición Civica) disparó: “Hay escándalo de inteligencia a cielo abierto”.

Foto: Télam

En tanto el radical, Mario Negri señaló: «El kirchnerismo hoy perdió por abandono, huyó como rata de la comisión de Juicio Político. Justo cuando algunos de sus integrantes, como Tailhade, que fueron los que  impulsaron esta farsa, tienen que ir a tribunales».

«Decidieron levantarse e irse, abandonaron, no sé qué comisión van a llamar otra vez. Es una vergüenza, huyeron como rata, porque no tenían forma de explicar, los que están presentes, lo que inventaron», gritó Negri.

En ese contexto, el interbloque de Juntos por el Cambio de Diputados convocó a una conferencia de prensa esta tarde desde las 18 en el Salón de Pasos Perdidos del Palacio legislativo para denunciar espionaje ilegal que involucra al oficialismo y que tiene como víctimas, entre otros, a los miembros de la Corte Suprema de Justicia, y del sorpresivo levantamiento de la comisión de Juicio Político.

Luego de 24 reuniones y más de 60 testigos, el proceso de juicio político que comenzó el pasado 26 de enero debía concluir con el dictamen de acusación antes del 17 de noviembre, fecha en que dejan de funcionar las comisiones. Según pudo saber Tiempo, por ahora no hay fecha de una nueva convocatoria, aunque en el oficialismo sostiene que ese encuentro se concretará ya con la firma de dictámenes contra los ministros del Corte por mal desempeño en sus funciones.

Massa y el balotaje

A pocos días de la segunda vuelta en la que se enfrentará a Javier Milei (La Libertad Avanza), Sergio Massa mantuvo una entrevista con la señal cordobesa Cadena 3 en la que manifestó: “Hablé con la presidenta de la comisión y la Cámara de Diputados, para plantearle que estamos en un proceso electoral y que no era momento de discutir el comportamiento de ningún juez de la Corte, porque si había alguna acusación cierta o falsa se podía ensuciar con el proceso electoral”.

“Si hay hechos de corrupción que están probados, está claro que se deben ventilar y los acusados deben tener derecho a defenderse; ahora, si hay una cuestión política, me parece inoportuno, porque la definición de qué modelo de Justicia vamos a tener desde el 10 de diciembre será parte de un diálogo mío con la oposición para que tengamos 10 años de una política judicial y no idas y vueltas”, agregó el tigrense.

Con términos formales, los magistrados no solo rechazaron los argumentos del bloque kirchnerista, sino que hablaron de un “proceso teñido de irregularidades” que violó la garantía de defensa y que tuvo como fin removerlos por el contenido de sus sentencias.

Este procedimiento apunta a condicionar o remover a los jueces cuyas sentencias no satisfacen los deseos de una circunstancial mayoría parlamentaria”, dijo Rosenkrantz. “Los cargos formulados evidencian, por un lado, que se está enjuiciando a los miembros de esta Corte por el contenido de sentencias que no satisfacen los deseos de algunos integrantes de la Comisión y, por el otro, que con ello se pretende condicionar futuras decisiones del Tribunal en causas actualmente en trámite”, advirtió Rosatti. Los jueces Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti optaron por no contestar las imputaciones.

Los descargos de Rosatti y Rosenkrantz

Mediante dos escritos distintos, Rosatti y Rosenkrantz dejaron expuestas sus posturas respecto al rol del bloque oficialista en la comisión de juicio político. En el caso del titular de la Corte, planteó “irregularidades que se cometieron a lo largo del proceso”. “Se pone a los jueces del Tribunal frente a la disyuntiva de indefensión en este juicio político o tener que desprenderse del conocimiento de causas institucionales en trámite”, dijo Rosatti en un escrito de 71 páginas.

También se aseguró que muchos de los cargos formulados por la comisión “carecen de las precisiones mínimas” como para conocer los hechos que se imputan y sus fundamentos. Y señaló que hasta se formularon cargos por hechos que no fueron denunciados en los pedidos de juicio político.

En tanto, Rosenkrantz manifestó que “hay cargos que vinculan hechos, datos o interpretaciones para construir una suerte de relato o novela de asociación libre para atribuirme inescrupulosamente faltas tan graves como falsas”. Asimismo, resaltó que “lo que está en juego no es menor” porque “tiene que ver con el funcionamiento del sistema republicano”.

Además, lanzó: “Este procedimiento apunta, en definitiva, a condicionar o, en última instancia, a remover a los jueces cuyas sentencias no satisfacen los deseos de una circunstancial mayoría parlamentaria. Esto pone en cuestión la independencia de todos los jueces de la República y constituye un ataque frontal a la separación de poderes”.