Unidad Popular, Forja, Libres del Sur, Patria de Iguales, Soberanxs, El Movimiento, Partido Comunista, Confederación Socialista, lanzaron esta semana “Confluencia”, un espacio político que se constituye en la ciudad de Buenos Aires con el objeto de construir «un frente amplio que derrote a las políticas de Milei y termine con veinte años de macrismo», según sostienen los referentes del nuevo espacio en su documento inaugural.
Estuvieron presentes Claudio Lozano (Unidad Popular), María Eva Koutsovitis (Unidad Popular), Gustavo López (Forja), Andrea Souza Barra (Forja), Daniela Gasparini (Libres Del Sur), Adolfo Buzzo Pipet (Libres Del Sur), Rafael Klejzer (Patria De Iguales), Alejandro Mosquera (Patria De Iguales), Alicia Castro (Soberanxs), Jonatan Baldiviezo (El Movimiento), Myriam Godoy (El Movimiento), Zaida Chmaruk (Partido Comunista), Ariel Elger (Partido Comunista), Jorge Rivas (Confederación Socialista) y Federico Tonarelli (Confederación Socialista).
En un documento conjunto, los dirigentes asumieron la tarea de “convocar a un nuevo reagrupamiento de las distintas experiencias populares con el objeto de colaborar en construir la fuerza política con orientación emancipadora que necesita hoy el pueblo argentino. Esta propuesta pretende transitar un camino de construcción que desande los recorridos de experiencias que fueron parte del fracaso que le abrió la puerta a las presentes políticas antipopulares. Que pueda superar un mero objetivo electoral y que se transforme en una herramienta de organización de la fuerza que hoy la Argentina y la ciudad reclaman. Estamos convencidos que dicha construcción excede el necesario ámbito de la discusión entre nuestros espacios”, dice el documento en uno de sus párrafos.
También acompañaron el lanzamiento, entre otros, Jorge Kreines (Partido Comunista), Humberto Tumini (Libres del Sur), Ramiro Gueber (Patria de Iguales), Mario Mazzitelli Partido Socialista Auténtico), Daniel Siciliano (FORJA), José María Pena (Tropa de Todos), Alejandro Marmoli (Proyecto Sur) y Carmen Cirano (MTL). Y Enviaron sus saludos Jorge Rivas (Confederación Socialista) y Alicia Castro (Soberanxs) quien pidió disculpas por no poder estar presente dado que se encontraba defendiendo a Aerolíneas Argentinas en el Parlamento Nacional.
El documento completo de Confluencia
El gobierno de Javier Milei expresa el claro intento de resituar en el centro de la escena los objetivos fundacionales de la experiencia del golpe de estado cívico-militar de 1976. Por primera vez en cuarenta años de democracia se reivindican los paradigmas del golpe. Reivindicación que hace del autoritarismo un vector principal de los libertarios. Así, la represión a la protesta social, la ofensiva contra dirigentes y organizaciones opositoras, y la escalada de violencia verbal, provocaciones e intentos de amedrentamiento, son parte de lo cotidiano de la gestión Milei. Nos encontramos enfrentando una verdadera revancha oligárquica que derrama sufrimiento sobre nuestro pueblo y a la que es necesario detener cuanto antes potenciando todas las iniciativas que la enfrenten.
El proyecto que encabeza el anarcocapitalista de Javier Milei combina el formato autoritario y represivo del aparato estatal, con la demolición de las condiciones de vida de la mayor parte de nuestra sociedad, la más profunda reprimarización de la economía y la decisión de avanzar en un proceso de dolarización que impida el retorno de un proyecto de desarrollo con base industrial, expansión de derechos y mayor igualdad.
En este marco se inscriben estos primeros diez meses de gestión con la pulverización de los ingresos populares, la destrucción del aparato productivo, la pérdida de puestos de trabajos, así como la apertura al saqueo de nuestros recursos naturales consolidando una tendencia evidente a la disolución nacional.
El DNU 70/23, la ley Bases y en especial el RIGI expresan ese rumbo. El desmantelamiento de áreas completas del estado y de las empresas públicas no es un intento de bajar el gasto, sino que persigue desmembrar la capacidad de los argentinos de actuar de acuerdo con sus intereses y no subordinados al capital más concentrado. Día a día nuestro pueblo ofrenda mayor pobreza e indigencia, mientras las expresiones del capital concentrado a nivel local y del capital financiero internacional -con sus personeros estratégicamente sentados en los principales puestos del gabinete-, incrementan sus ganancias en un esquema de extractivismo, reprimarización de la economía, endeudamiento y valorización financiera.
Los vetos a las leyes de actualización de las jubilaciones y de financiamiento universitario no sólo revelan crueldad sino la afirmación de un proceso de redistribución de ingresos y riquezas desde la gran mayoría de nuestra sociedad hacia un minúsculo grupo poblacional ligado al capital concentrado y a los acreedores de la deuda pública. Solo así puede entenderse que contemporáneamente se aliente un blanqueo que beneficia a los que evadieron, al tiempo que se permita la entrada de dólares del submundo del delito, o que se bajen impuestos a los que más tienen, y se sostengan privilegios a los capitalistas amigos de Milei y Caputo.
En tan poco tiempo el resultado es una catástrofe: menos soberanía, menos democracia, pobreza que trepo al 52,9%, y la pobreza infantil 66,1%. Un millón de niñas y niños se priva de una comida diaria por falta de recursos. Mientras tanto casi 200.000 trabajadores registrados pierden sus trabajos, cierran 12 mil pequeñas y medianas empresas y los despidos en el área estatal superan los 30.000 trabajadoras y trabajadores.
No es sino en el marco de este escenario nacional en el que hay que situar la realidad que viven hoy los y las habitantes de la Ciudad de Buenos Aires. Una ciudad donde el modelo macrista, que con la presente gestión va a cumplir 20 años de gobierno, no ha hecho otra cosa que ampliar la desigualdad y multiplicar la pobreza. En el año 2015 el 16,4% de los habitantes de la Ciudad de Buenos Aires eran pobres, hoy este porcentaje prácticamente se duplica llegando al 32.1%. A la vez, los indigentes que eran el 5.2% de los habitantes, crecen aún más llegando a abarcar al 13.5% de la población de la Ciudad. En este contexto, los sectores que, sin ser pobres, se encuentran en situación de vulnerabilidad representan el 10,7% de la población, y los sectores medios en condiciones de absoluta fragilidad 12,3% de la población de CABA. Casi 6 de cada 10 porteñas y porteños son indigentes, pobres o les cuesta llegar a fin de mes. Casi medio millón pasa hambre cotidianamente y la tan mentada clase media ciudadana se achico considerablemente. Mientras en el 2015 constituían el 53% de la población, hoy no llegan al 40% de la misma.
Durante este período donde la constante fue el deterioro en las condiciones de vida de porteñas y porteños, en la ciudad se construyeron 10 millones de metros cuadrados, el equivalente en superficie a 5 veces Puerto Madero, de viviendas en general suntuosas que no derramaron en mitigar la emergencia habitacional que hoy alcanza a casi 1 de cada 5 porteños. El modelo que el macrismo consolidó en la ciudad está basado en el saqueo de nuestro patrimonio y nuestros bienes comunes: apropiación de la tierra pública, negociado y privatización de los servicios urbanos y privilegios a los grandes grupos inmobiliarios y económicos. Y aunque estamos en el distrito más rico del país, con un presupuesto que supera los 13 billones de pesos (4 millones de pesos por habitante al año) la ciudad se encuentra en emergencia social, habitacional y ambiental. Buenos Aires es de las capitales del mundo con menos espacios verdes públicos por habitante. Pero además este déficit en espacios verdes y arbolado público no se distribuye uniformemente, consolidando la histórica desigualdad norte-sur, también en términos ambientales y climáticos.
El macrismo ofrece a los habitantes de la ciudad la ilusión de una supuesta modernización, consumo y desarrollo cuya contracara es la precariedad del cotidiano de quienes habitamos la ciudad. Este modelo de deterioro aplicado por el macrismo en CABA le ha permitido al Círculo Rojo, a los factores de poder que desde la dictadura hasta hoy han impuesto el rumbo de la Argentina, consolidar una fuerza política nacional de orientación neoliberal al servicio de sus intereses. Y desde esa realidad se han transformado en cómplices directos de esta revancha oligárquica, que bajo el mascaron de proa anarcolibertario, viene afirmando un verdadero golpe al interior del propio sistema institucional.
Es por esto, que quienes integramos esta Confluencia, conscientes de la gravedad de la situación que atraviesan las y los jubilados, los sectores populares, los trabajadores, los pequeños y medianos empresarios, y la clase media en el país y en la Ciudad, nos proponemos convocar a un gran frente que se articule en torno a dos premisas básicas: Quebrar, más temprano que tarde, las políticas de Javier Milei, y terminar con los 20 años de macrismo en la Ciudad de Buenos Aires.
En el marco de esta definición política, es que nos proponemos hoy construir una agenda completamente distinta para nuestra ciudad, que permita ponerle fin a la lógica mercantilista que el macrismo ha instalado, recuperando la ciudad para quienes la habitamos bajo el paradigma de la democracia participativa ambiental y la igualdad urbana.
Pensar hoy en un modelo de ciudad inclusivo implica garantizar los derechos de todos sus habitantes y transformar la vida cotidiana de quienes viven, trabajan, estudian y disfrutan la ciudad.
Nuestra Confluencia es para insistir en la necesidad de un Frente de Unidad Amplio, basado en un programa de transformación de la Ciudad y el país. Hacia una ciudad de Buenos Aires integrada a una Patria próspera, con oportunidades para todos y todas, igualitaria, justa, con más libertades y mejor democracia.
Quienes suscribimos este manifiesto asumimos la tarea de convocarnos y convocar a un nuevo reagrupamiento de las distintas experiencias populares con el objeto de colaborar en construir la fuerza política con orientación emancipadora que necesita hoy el pueblo argentino. Esta propuesta pretende transitar un camino de construcción que desande los recorridos de experiencias que fueron parte del fracaso que le abrió la puerta a las presentes políticas antipopulares. Que pueda superar un mero objetivo electoral y que se transforme en una herramienta de organización de la fuerza que hoy la Argentina y la ciudad reclaman. Democratizar la construcción y el debate de las diferencias a su interior son una clave insoslayable en su derrotero.
Estamos convencidos que dicha construcción excede el necesario ámbito de la discusión entre nuestros espacios. La profundidad de la tarea requiere de dos vectores: democratizarlo al conjunto de la sociedad y territorializar el debate. Por lo tanto, como este debate se da en medio de una crisis que pone en riesgo la vida cotidiana de los y las porteñas debemos articular la construcción política con iniciativas concretas que nos permitan disputar la mejora en las condiciones de vida de la sociedad.
En ese sentido, la Ciudad cuenta con un fondo anticrisis de 350 millones de dólares. Por eso, en este contexto de emergencia habitacional, ambiental y social, impulsaremos una propuesta de desarrollo político y organización territorial a ser debatida democráticamente con el conjunto de la ciudadanía porteña y que tendrá que ver con democratizar la decisión respecto a la asignación de los recursos mencionados en dirección a financiar políticas concretas que nos permitan mitigar la crisis utilizando el fondo anticíclico. Respetando el espíritu de la ley 1777 de Comunas que establece la discusión participativa del presupuesto y la ley 6114 de transparencia presupuestaria, recorreremos cada una de las 15 comunas de la ciudad para discutir colectivamente con las y los porteños iniciativas concretas que permitan mitigar la profunda crisis que transitamos. Y para dar inicio al debate planteamos tres propuestas concretas:
· La compra de 5000 viviendas para destinarlas a alquiler social o comodato para las personas adultas mayores y primera vivienda para jóvenes
· La construcción de 150 plazas de cercanía para mitigar el enorme déficit de espacio verde público.
· La construcción de 50 polideportivos donde poder practicar deportes gratuitamente.
Y por supuesto, que recogeremos de cada uno de los encuentros todas las propuestas que surjan para luego someterlas a una votación abierta y pública. Con las propuestas más votadas elaboraremos un proyecto para presentarlo en la Legislatura Porteña.
FIRMAS
CLAUDIO LOZANO- UNIDAD POPULAR
MARÍA EVA KOUTSOVITIS – UNIDAD POPULAR
GUSTAVO LÓPEZ – FORJA
ANDREA SOUZA BARRA – FORJA
DANIELA GASPARINI – LIBRES DEL SUR
ADOLFO BUZZO PIPET – LIBRES DEL SUR
RAFAEL KLEJZER – PATRIA DE IGUALES
ALEJANDRO MOSQUERA – PATRIA DE IGUALES
ALICIA CASTRO-SOBERANOS
JONATAN BALDIVIEZO – EL MOVIMIENTO
MYRIAM GODOY – EL MOVIMIENTO
ZAIDA CHMARUK – PARTIDO COMUNISTA
ARIEL ELGER – PARTIDO COMUNISTA
JORGE RIVAS-CONFEDERACIÓN SOCIALISTA
FEDERICO TONARELLI- CONFEDERACIÓN SOCIALISTA