Argentina ingresa a la cuarta fase del aislamiento físico, preventivo y obligatorio hasta el 10 de mayo. Con mayor focalización regional y discriminación por rama productiva, el gobierno nacional administra a través de decretos y resoluciones administrativas la circulación del virus, el humor social y el nivel de actividad económica. Tal como se esperaba, la región del AMBA seguirá como hasta ahora.
“Los argentinos han colaborado mucho respetando las reglas sanitarias que nos impusimos”, dijo el presidente Alberto Fernández. “Tenemos que estar orgullosos de nosotros mismos. Hemos podido acatar un criterio lógico y sanitario que preservó nuestra salud y nuestras vidas y la de los otros. Hemos podido cumplir alguno de los objetivos que nos fijamos inicialmente, pero seguimos en medio de una pandemia que asola al mundo y que en la argentina no ha tenido la capacidad de daño que tuvo en otros lugares. Eso ha ocurrido por el comportamiento de los argentinos y argentinas”.
Las principales medidas anunciadas por el jefe Estado fueron las siguientes. Los grandes aglomerados urbanos son los lugares de mayor riesgo de transmisión del virus. Por ese motivo las ciudades de más de quinientos mil habitantes seguirán cumpliendo las medidas de aislamiento social, preventivo y obligatorio como lo hicieron durante los últimos quince días.
La Administración Pública Nacional seguirá funcionando con las dotaciones mínimas establecidas. Seguirán suspendidas en todo el país las clases presenciales, en todos los niveles y modalidades; los eventos públicos y privados, sociales, culturales, recreativos, deportivos, religiosos y otros; los centros comerciales, cines, teatros, centros culturales, bibliotecas, museos, restaurantes, bares, gimnasios, clubes y cualquier espacio público o privado y actividades turísticas, apertura de parques, plazas y similares.
Las fronteras seguirán cerradas para el ingreso de extranjeros. Y el de los residentes continuará en los términos que sean compatibles con el control sanitario. El transporte de pasajeros aéreo de cabotaje e internacional, terrestre interurbano, entre jurisdicciones e internacional, continuará sin autorización para funcionar.
Los gobernadores y las gobernadoras podrán decidir excepciones al cumplimiento de las medidas de aislamiento. Estas excepciones serán autorizadas únicamente cuando se cumplan las siguientes cinco condiciones sanitarias: 1) que el tiempo de duplicación de casos confirmados no sea inferior a los quince días; 2) que sistema de salud tenga la capacidad adecuada para dar respuesta; 3) la evaluación positiva de las autoridades sanitarias respecto al riesgo socio-sanitario en relación con la densidad poblacional; 4) que el porcentaje de la población exceptuada de las medidas de aislamiento no supere el 50% de la población total del departamento o partido. 5) La zona geográfica no podrá estar definida como “con transmisión local o por conglomerado” por la autoridad nacional.
Si alguno de estos indicadores no se cumple, el departamento o partido no podrá avanzar con las excepciones y el Jefe de Gabinete podrá disponer el cese de las excepciones que incumplan con los criterios epidemiológicos y sanitarios.
Una novedad para todos y todas las personas fue que se podrán realizar salidas breves (caminatas de máximo 1 hora) a no más de 500 metros del domicilio particular, sin utilizar transporte público y cumpliendo con las recomendaciones de distanciamiento e higiene.
“Somos conscientes de que hay muchos argentinos y argentinas que están esperando poder recuperar su vida cotidiana para lograr su sustento, pero no queremos aumentar el riesgo más de lo debido”, se atajó Alberto Fernández.
Con el mismo ritual de los anuncios anteriores, el jueves pasado el presidente recibió al comité de asesores médicos y científicos, que le recomendó seguir la cuarentena y evitar la circulación social. El viernes, el mandatario repitió el contacto virtual con los gobernadores.
La cuarentena funciona y se cumple el objetivo de no colapsar el sistema de salud, por el momento. Es por eso también que los mandatarios provinciales manifestaron su apoyo de manera expresa e individual en sus redes sociales el viernes, y en un comunicado conjunto el sábado.
Los ministros Santiago Cafiero (jede de Gabinete) y Wado De Pedro (Interior) revisaron junto al jefe del Estado los nuevos pedidos de los mandatarios provinciales. Hasta el momento se había habilitado el ejercicio de las profesiones liberales en las provincias de Entre Ríos, Misiones, Salta, San Juan y Neuquén. También se puso en marcha de las obras públicas privadas en las provincias de San Juan, Santa Cruz, Misiones, Entre Ríos, Salta, Mendoza y Neuquén.
Plan de obras públicas
Plantas potabilizadoras a través de Aysa, rutas, calzadas y muchos hospitales. Ése es el plan del gobierno para ir habilitando a cuenta gotas la obra pública en zonas abiertas. Y todo bajo un estricto protocolo sanitario avalado por el ministerio de Salud.
En las reuniones virtuales y presenciales entre la Uocra, la Cámara de la Construcción y el gobierno nacional se elaboró un punteo sobre qué obras presentan las condiciones para poder ser retomadas o empezadas. El riesgo de despidos también fue una variable a la hora de priorizar. Pero la preocupación que tiene el presidente sobre las condiciones de higiene y seguridad en las obras fue transmitida al ministro de Obra Pública Gabriel Katopodis de manera categórica. Si no se puede garantizar un protocolo de trabajo que respete el aislamiento y la higiene, no se habilita.
Las obras públicas sanitarias ligadas a la pandemia son las prioritarias. Son 52 en todo el país para los cuales se invertirán 5.500 millones de pesos. De ellos, doce están ubicados en el corunbano bonaerense.