El candidato a presidente por Consenso Federal, Roberto Lavagna, y su compañero de fórmula, Juan Manuel Urtubey, cierran este jueves al mediodía su campaña en la cima del cerro San Bernardo, en Salta.
Luego de intensificar su aparición en los medios y focalizar la actividad en la provincia de Buenos Aires, Lavagna llega a la tierra de su compañero de fórmula para ponerle el broche final a un campaña que concluye con un único objetivo: superar los dos dígitos.
Ante la presencia de todos los candidatos nacionales, Lavagna repetirá su discurso “antigrieta”, pondrá en valor su experiencia en tiempos de crisis y expondrá nuevamente su batería de propuestas para abordar los serios problemas económicos que afronta la Argentina.
Más allá del cierre de campaña y los resultados del próximo domingo, la fuerza que encabezan Lavagna y Urtubey, que aglutinó 2 millones de votos en las PASO, será parte de la discusión a partir del próximo lunes. Tanto el exministro de Economía como el actual gobernador salteño ya son tentados para sumarse a otros espacios a partir del 28 de octubre. Lavagna intentó despegarse de un posible cargo en el eventual Gabinete de Alberto Fernández. Urtubey tuvo que negar su adhesión al posmacrismo que asoma en Cambiemos de la mano del gobernador mendocino Alfredo Cornejo.
El saldo de la campaña electoral para el equipo que acompaña a Lavagna es positivo pese a no haber podido romper la polarización para convertirse en una opción real de poder de cara al próximo 27 de octubre.
La satisfacción tiene que ver con la certidumbre de haber instalado temas y que los principales candidatos hayan tenido que adoptar para sus campañas algunas de las propuestas realizadas por Lavagna.
En tanto, para el gobernador salteño, la campaña deja un saldo netamente positivo. El aumento de su nivel de conocimiento a nivel nacional lo posiciona mejor para futuras contiendas.
