«En el caso Maldonado que todos sabemos el mal uso que se le hizo el daño que se le produjo a la sociedad porque gente de buena fe creyó en eso, fue una estaba moral, el uso electoral que se hizo de alguien que había fallecido en un drama», dijo el funcionario en el programa Ahora es cuando de radio Blue.
«No tenemos que hacer prejuzgamientos tan drásticos a priori. Lo de Echazú», dijo refiriéndose al gendarme ascendido por Gendarmería, «es una potestad de la fuerza, un hecho administrativo, y si la investigación determina, como se lo acusó, de haber estado y sido quien golpeó, quien pegó, quien hizo lo que hizo, eso va a quedar sin efecto. No son señales», aseguró.
«Hoy estamos en el prejuzgamiento», insistió. «Nosotros creemos, y yo, como secretario de Derechos Humanos, soy un fiel defensor del derecho a la protesta, que ese derecho a la protesta no puede dañar el derecho de otro ciudadano, fundamentalmente el de transitar. Tenemos que ir a una lógica de convivencia», concluyó.
Entre otras cosas, habló del debate que abrieron las declaraciones de Nicolás Massot y que hablaban de reconciliación con los genocidas de la dictadura.
El término reconciliación va a ser imposible en tanto los genocidas no reconozcan lo hecho y pidan perdón por eso. Nosotros como Estado tenemos que trabajar por la protección de la gente y no podemos avalar el terrorismo de estado ni nada que se le parezca.
«La reconciliación corresponde al ámbito personal, no hay ningún funcionario que pueda perdonar en nombre de nadie. Tenemos que trabajar en la convivencia de la Argentina, eso significa que tenemos que superar los antagonismos de los años 70 no podemos seguir ahondando esas diferencias. Creo que reconciliación es de un ámbito privado, no se puede trabar el trabajo de la memoria, la verdad y a justicia. Aquí la justicia tiene un rol fundamental, hay que exigir que se terminen los juicios y que tengan la sentencia que corresponda», agregó.
A su vez se refirió a la prisión domiciliaria. Comprendo el malestar de los vecinos de Mar del Plata, en lo personal no me gustaría tenerlo de vecino a Etchecolatz pero tenemos que entender que la prisión domiciliaria no conculca la pena, la cambia de lugar y la justicia tiene que tratar de que no pase lo que pasó el sábado, dijo en referencia a la salida del genocida.
Consultado sobre el caso Milagro Sala, expresó, «siempre dije que se respete la autonomía provincial pero lleva mucho análisis de debate, todos coincidieron en que la prisión domiciliaria estaba bien, lo hicimos saber a la justicia jujeña pero nos encontramos con la potestad de cada provincia y de la justicia», afirmó.
Además, el conductor le preguntó por los últimos hechos de represión, y el Avruj dijo, «Tenemos que ir a esto de la convivencia a entender que el orden no tiene que confrontar con los Derechos Humanos, que el derecho de protesta tiene que estar garantizado y que los excesos tienen que estar investigados y sancionados por la fuerza y la justicia».