“Nadie puede vivir bien acá, sabiendo que hay otros argentinos viviendo tan mal”. Con un mensaje que intentó hilvanar puentes entre el distrito más rico del país y el resto del mapa nacional, el Frente de Todos relanzó este martes la campaña en la Ciudad de Buenos Aires y, en su primera carta, mostró que el candidato presidencial del espacio, Alberto Fernández, le pondrá al cuerpo al intento de forzar un balotaje que derrumbe la ilusión reeleccionista de Horacio Rodríguez Larreta.
“Empezamos la segunda etapa y voy a estar más presente. Vamos a convencer a todos los porteños de que tenemos la posibilidad de vivir en una Ciudad que se integre al resto del país, una Argentina federal”, subrayó Fernández ante una desbordada Aula Magna de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
El frente opositor eligió ese escenario en la Ciudad Universitaria del barrio de Nuñez para presentar el compromiso de Fernández y el candidato a jefe de Gobierno por el espacio, Matías Lammens, con la ampliación y fortalecimiento del presupuesto destinado a la investigación y la creación de una Agencia de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de Buenos Aires, entre otros puntos.
Presentado bajo el slogan “Buenos Aires, ciudad del conocimiento”, el punteo también incluye la promesa de generar “acciones estratégicas” para que el Estado Nacional y el gobierno de la Ciudad propicien que las instituciones científicas y tecnológicas nacionales participen en la resolución de problemas urbanos, vinculados a la calidad de vida de los habitantes del cuarto distrito electoral del país.
Fernández dejó en claro que se involucrará en la campaña porteña con el mismo tono que consiguió la adhesión de los gobernadores y referentes territoriales del interior en el tramo hacia las PASO. “Tenemos que empezar a devolver a cada provincia lo que le debemos por habernos elegido como la Capital Federal”, dijo el candidato opositor tras definir a Buenos Aires como la “ciudad más suculenta” del país. Y agregó: “Debemos hacer de Buenos Aires algo que nos pueda hacer distintos. Sería buenísimo dejar de gastar plata en publicidad de obras, que están muy bien, para favorecer a la ciencia y la tecnología”.
En varias oportunidades habló de convertir a la Ciudad en “la Boston” de América Latina. “Las grandes utopías son las que mueven a las sociedades”, subrayó.
Además de Fernández y Lammens, participaron del acto -una puesta en escena de entrevista pública que incluyó un cambio de escenografía de sillones por taburetes- la candidata a vicejefa, Gisela Marziotta; y la postulante a senadora Dora Barrancos, una de las más ovacionadas por investigadores, profesores, estudiantes y militantes.
Antes de subir al escenario, Lammens compartió una reunión con expertos y académicos. “Tenemos recursos humanos valiosos, un gran talento individual. Hay que cuidar a los científicos y eso tiene dos requisitos: voluntad política y financiamiento”, subrayó.
El candidato a jefe de Gobierno apuntó que actualmente no se cumple con la ley de financiamiento para el sector que destina un 1 por ciento del presupuesto al área. “Hoy esta ley no se cumple. Tenemos que comprometernos con un marco institucional porque muchos investigadores se están yendo del país”, puntualizó.
Los cuatro candidatos ingresaron al escenario mientras desde las butacas sonaba el ya clásico de la campaña “Macri ya fue, Vidal ya fue. Si vos querés, Larreta también..”. La musicalización generó una humorada de Barrancos: “Científicos bailando, nunca visto”, dijo la socióloga, referente feminista y exmiembro del directorio del Conicet.
La apuesta del frente opositor en la Ciudad es lograr que la «ola» nacional de apoyo a la fórmula Fernández-Fernández empuje a Lammens para forzar el escenario de balotaje. Para evitarlo, el alcalde porteño debe llegar al 50 por ciento de los votos.
El Frente de Todos busca sumar consensos con un discurso propositivo y argumentos de corte institucional: el macrismo gobierna la Ciudad desde hace doce largos años.
