Como todos los años, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) realizó el cierre del programa Jóvenes y Memoria, que este organismo lleva adelante en forma ininterrumpida desde hace más de 21 años. Esta vez, la actividad contó con récord de inscripciones y también participaron adolescentes del interior del país.
“Se trata de la XXI convocatoria del programa Jóvenes y Memoria de nuestro organismo, que este año tuvo una inscripción récord”, contó Sandra Raggio, directora general de la CPM, a Tiempo. Unos 18 mil jóvenes y educadores de todo el territorio de la provincia de Buenos Aires y de otras cinco provincias “participaron del encuentro por el cierre que hicimos en el complejo turístico de Chapadmalal, la actividad comenzó el 15 de noviembre y finalizó la semana pasada”, agregó.
Desde hace veintiún años este programa implementa en todo el territorio provincial una pedagogía de la memoria; cuyas protagonistas son las nuevas generaciones. Son los jóvenes quienes a partir de sus intereses construyen nuevas narrativas sobre el pasado reciente y la agenda del presente. Tienen identificadas todas las desigualdades que existen en la sociedad y pretenden crear un mundo distinto.
“Como cada año, jóvenes de escuelas secundarias públicas, privadas o en contexto de encierro, CENS, institutos de formación docente, organizaciones sociales, políticas y culturales comparten la investigación que realizan durante todo el año”, detalló Sandra. También valoró que los trabajos que hacen son elaborados en “sus propias escuelas, barrios y ciudades”.
“Estas investigaciones son una agenda amplia de temas sobre memoria y Derechos Humanos, y están hechos desde la particularidad de los diferentes territorios de la provincia”, describió la directora. Aseguró que la participación fue totalmente libre, federal y que participaron “pueblos del interior del país, de muy pocos habitantes, también los distritos más populares del conurbano bonaerense”.
“La democracia exhibe casi cuarenta años en forma ininterrumpida en nuestro país, pero hoy más que nunca sabemos que no está dada”, sostuvo Sandra. También aclaró que lo dijo “porque la democracia es mirar la realidad con perspectiva de derechos y construir un proyecto colectivo que realmente ayude al pueblo”.
“El bien común es el núcleo de la democracia, es la forma de vida política de las grandes mayorías, es un Estado que debe garantizar los derechos de esas mayorías”, aseveró la directora. Cerró diciendo que “nosotres venimos a reafirmar esa democracia, a reafirmar que juntes, en la diversidad, podemos transformar el mundo”.
Una propuesta inclusiva
Participaron jóvenes de 129 de los 135 partidos del territorio de la provincia de Buenos Aires. Fue libre y federal. También estuvieron jóvenes del interior del país; Chubut; San Juan; Santa Fe-Rosario; Santiago del Estero y CABA.
“Cuando los discursos anti-derechos, que degradan lo social, logran instalarse en la sociedad es porque la democracia no dio respuesta a las grandes desigualdades que persisten en el presente”, dijo Roberto Cipriano García, abogado y secretario ejecutivo de la CPM. Continuó explicando que en este sentido Jóvenes y Memoria viene a reafirmar “la posibilidad de encontrarnos, de respetarnos en la diversidad, de debatir y de pensar cómo construimos un mundo distinto”.
“Lo hacemos desde los barrios y las distintas localidades”, aseguró García. Explicó que las personas que participan “son quienes trabajan los temas de violaciones a los Derechos Humanos que pasan en sus comunidades”.
“Estos jóvenes responden a todo lo que sucede en la sociedad con sus trabajos, reconstruyen las historias de desaparecidos y desaparecidas de sus localidades”, valorizó el secretario. También destacó que en consonancia con los 40 años de la guerra de Malvinas, “se presentaron muchas investigaciones que recuperan las historias de los ex combatientes”.
“Todo este trabajo nos sirve para pensar las demandas de Malvinas hoy, sobre la soberanía y la defensa de los recursos naturales”, reflexionó García. Siguió pidiendo justicia por las “torturas que sufrieron los soldados conscriptos por parte de los jefes militares”.
“Gran parte de las investigaciones tratan temas de la agenda del presente, la denuncia de las desigualdades y las formas de organización para la conquista de derechos”, contó el secretario a este diario. También aseguró que en los trabajos que hicieron los jóvenes dejan al descubierto que el pueblo padece:”Infraestructura precaria, falta de acceso a servicios básicos en los barrios populares, pobreza extrema, casos de violencia policial, gatillo fácil, femicidios, discursos de odio contra las diversidades y disidencias sexuales”.
“Todos estos temas hacen a la agenda de las juventudes de hoy, de las nuevas generaciones que tienen una mirada crítica sobre la sociedad en la que viven y expresan un reclamo político concreto”, subrayó García. Finalizó señalando que “los jóvenes tienen bien identificadas las desigualdades sociales que existen, quieren suplir las necesidades que padecen sus vecinas y vecinos”.
Participaron en Jóvenes y Memoria
Emilce Moler, sobreviviente de la noche de los lápices, ocurrida durante la madrugada del 16 de septiembre de 1976; asesores de la ministra de Gobierno bonaerense Cristina Álvarez Rodríguez; el presidente de la CPM Adolfo Pérez Esquivel; el vicepresidente Víctor de Gennaro; el secretario ejecutivo Roberto Cipriano García; les integrantes del organismo Guillermo Torremare, Ana Soffiantini, Yamila Zavala Rodríguez y la directora general Sandra Raggio.
