El trabajo contiene más de un centenar de páginas. No tiene desperdicio. Fue elaborado por una brigada de investigación de la policía brasileña a pedido del Ministerio Público Fiscal, en el contexto de la investigación por el denominado Lava Jato. Una parte de este pormenorizado trabajo lo involucra y compromete seriamente a Ángelo Calcaterra, el primo del presidente Mauricio Macri. El dossier revela múltiples cadenas de mensajes y correos entre ex directivos de Odebrecht, empresarios de la construcción y funcionarios, y una parte de ellos se relacionan con las denuncias de cobro de coimas por parte de la empresa de origen brasileño, en relación el proyecto y la realización del soterramiento del ferrocarril Sarmiento.
El caso fue investigado y publicado por el periódico brasileño El Estado de San Pablo. La producción fue realizada por los periodistas Fabio Serapião, Beatriz Bulla y Fausto Macedo y en la nota se revela que la siglas DGI es el nomenclador utilizado por Odebrecht para identificar el monto de las coimas, según se considera luego de evaluar una serie muy extensa de testimonios judiciales considerados clave.
En la producción se afirma que el actual CEO de IECSA SA, Héctor Javier Sánchez Caballero habría sido el «contacto» para tramitar el pago de sobornos en 2010, a la empresa era propiedad del arquitecto Angelo Calcaterra. IECSA es la principal empresa de GRUPO ODS y se especializa en la ingeniería, provisión y construcción en proyectos de infraestructura, edificios de alta complejidad, puentes de grandes luces, autopistas y obras viales, presas y obras de saneamiento, obras de infraestructura ferroviaria y portuaria; ductos y redes de distribución, generación eléctrica, térmica e hidráulica; líneas de transmisión de energía y subestaciones transformadoras.
Héctor Javier Sánchez Caballero es el mismo que junto a Santiago Ramón Altieri, Juan Ramón Garrone, Alejandra Erika María Kademain y Víctor Ramón Ignacio Folch, todos directivos de la empresa, que fueron imputados en la causa que la justicia en lo Penal Económico abrió en agosto del 2016 contra IECSA, por presunta evasión de aportes previsionales por 12 millones de pesos, que habría ocurrido en los últimos dos años.
El documento que menciona a Sánchez Caballero y a Ángelo Calcaterra, dado a conocer por el diario brasileño, menciona a decenas de empresarios de la construcción y funcionarios, que se relacionan muchas con seudónimos o sobrenombres, como «TATU, CHORAO, BIG BOSS, TOTTI y MORENO». También se demuestra el uso de siglas en relación con los pagos.
En el dossier, hay al menos cinco mensajes relacionados con el pago de coimas en el soterramiento del Sarmiento. Varios de ellos fueron hallados en la computadora de Mauricio Couri Ribeiro, quien es un histórico ejecutivo de Odebrecht en la Argentina. La PC fue secuestrada y analizada por la policía brasileña que se detuvo especialmente en una comunicación que lleva por asunto «Reunión Sarmiento 29/04/10 y que detalla lo ocurrido en una reunión realizada en Buenos Aires entre directivos de IECSA y Odebrecht. Allí se advierte el siguiente textual:
1 – Subetapa 1 – Ingeniería + obrador + 5 puentes
2 – Anticipo de 15% de $ 140 MM – U$ 21 MM
$ 13 MM de sellado + $ 4 MM = $ 17 MM
Dgi – $ 1 MM
3 – A 30 días – Informe de pontes – $ 100 MM
Dgi – U$ 3 MM
4 – A 90 días – $ 500 MM – Bonos Anses
Dgi – U$ 16 MM
En otro mensaje, que fuera enviado por Couri Ribeiro el 9 de junio de 2010 a las 16:33, con el asunto «Reuniao com Sánchez Caballero-10/06», se refiere de una secuencia de tramitaciones y pasos a seguir con el objetivo de reactivar la obra en cuestión y es el que se considera más comprometido para el ejecutivo de IECSA. Dice concretamente:
Reuniao com Sánchez Caballero – 10/06
1 – Dgi’s – Contacto directo
2 – Aprovar Director Tecnico
3 – Equipe do proyecto trabalhar juntos
4 -Organizar/Disminuir comités
En otro correo electrónico se cita a Lourenço Ghella, empresario de la empresa italiana Ghella, que junto con Odebrecht, Iecsa y Comsa, se adjudicó la obra del Sarmiento, luego de supuestos pagos de coimas por un total de entre u$s 20 y u$s 35 millones según las investigaciones. Lo hallado en la máquina de Couri Ribeiro involucraría también al ex funcionario de la Secretaría de Transporte, Manuel Vázquez y también a Ricardo Jaime.
Esta revelación de la prensa brasileña se concreta poco después de que el fiscal federal Gerardo Pollicita reclamara mediante un exhorto que Brasil informe si Odebrecht cometió delitos en connivencia con funcionarios argentinos y empresas como IECSA, justamente en la causa por «Lava Jato», el mayor caso de corrupción en la historia de ese país.