Ariel Garzi, el ex testigo reservado en la causa por la desaparición forzada de Santiago Maldonado sostuvo: «Cuando Bullrich me mandó al frente, fue una indirecta para ganar mi silencio… no me voy a quedar callado». La ministra de Seguridad Patricia Bullrich dio a conocer su identidad en la exposición que hizo en el Senado hace 15 días. Asimismo, denunció encubrimiento de la ministra a la Gendarmería, fuerza de seguridad acusada de desaparecer a Santiago.
«Llamé a Santiago el 2 de agosto y alguien atendió el teléfono por 22 segundos. Nadie habló del otro lado. Cuando llamé a Santiago el 2 de agosto se escuchaba una habitación con eco, con pasos fuertes, similares a las botas», sostuvo Ariel en diálogo con radio Cooperativa. «Tienen el resultado de la pericia telefónica y la están ocultando porque no les juega bien, la están encubriendo», aseguró.
«La gente de la comunidad vio como lo subían a Santiago en una camioneta rumbo a Esquel, y a Esquel nunca llegó. Bullrich es una persona bastante bicha, pícara. La mala información siempre va a estar, que genera confusión», sostuvo en diálogo con Ida y Vuelta.
«Gente declaró que Gendarmería sacó a Santiago del río y la fiscal Ávila no lo tomó en cuenta. Tratan de encubrir». «A Santiago lo desapareció Gendarmería», sostuvo y enumeró a los responsables: «Pablo Nocetti, Patricia Bullrich y el juez Otranto».
Garzi cuenta que la represión es constante en los alrededores de la estancia del empresario textil italiano Luciano Benetton. «Guardas personales de Benetton se pasean por la ruta, desfilan y disparan a la entrada de la comunidad», relató. «La Policía de Río Negro no duda en gatillarte o hacer simulacros de fusilamientos para conseguir información».
«Hace 4 meses nos conocimos con Santiago. Un buen pibe, buen amigo, gran tatuador, recolectaba frutas, es vegano. Con Santiago compartíamos la misma lucha, el apoyo a las comunidades originarias, allí empezó nuestra amistad», recordó.