El ministro de Educación, Esteban Bullrich aseguró que el sistema educativo argentino no sirve más y planteó que hay que cambiarlo, al tiempo que les pidió a los empresarios que se comprometan para que sus trabajadores terminen el secundario.
En la exposición temática en el 52º coloquio empresarial de Idea denominada De la educación al trabajo: cómo vamos a llegar, Bullrich sostuvo que en la actualidad lo que vale es mover el cerebro para enfrentar los problemas y este es un sistema educativo que está preparado para otra cosa.
En una dura crítica al sistema educativo actual, consideró que está diseñado para hacer chorizos, todos iguales, empleados en empresas que hacían todo el día lo mismo, que usaban el músculo y no el cerebro y nunca lo cambiamos.
El desafío que tenemos es cambiarlo y la responsabilidad es de todos y no le podemos echar el fardo a los maestros, señaló el ministro de Educación y Deporte quien agregó: El sistema educativo debe ser para todos, en serio.
En ese sentido, Bullrich agregó: Tenemos que ir a la jornada extendida, basta, no hay más discusión. Pero no más horas de hacer chorizos, sino que se trata de poner más horas para que desarrollen el conocimiento. A 200 años del 9 de julio de 1816 no tiene independencia quien no puede elegir y quien no puede comprender lo que lee.
Y se preguntó: El 50 por ciento de los jóvenes no terminan la secundario. Es casual que el 50 por ciento esté en la pobreza. Eso no lo resolvemos con un plan social a esa pobreza. Tenemos que tener un sistema absolutamente diferente, todos tienen que tener acceso. Todos a la escuela a los 3 años. En ese sentido, en una entrevista que brindó el pasado 9 de octubre a la agencia estatal Télam, Bullrich dejó un concepto llamativo: «Esto no se va a cambiar con planes sociales, a ese pibe le podes dar un plan social pero esa plata la va a usar para comprar balas, lamentablemente tenemos que pensar eso, hoy ese pibe no ve el futuro, nosotros, la dirigencia política, no se los estamos mostrando».
«Tenemos que adaptar el sistema. Gradualmente la Argentina se va a reinsertar en el mundo y por eso importante la generación de nuevos cerebros», agregó.